En enero nunca hay estrellas

En enero nunca hay estrellas

El mercado de enero nunca ha dado grandes soluciones futbolísticas, salvo el caso de Davids con el Barcelona. Este año son los dos conjuntos de Madrid, Real y Atlético, los que parece que andan a la caza de un salvador que les permita enderezar su rumbo liguero. La apuesta blanca es Cassano y la rojiblanca la del checo Rosicky. La realidad es que todas las alternativas que se buscan suelen ser fracasos estrepitosos que no solucionan nada.

Salvo en el caso de Argentina y Brasil, sus ligas concluyen en estas fechas, el muestrario de futbolistas tampoco te aporta mayor calidad. En su mayoría se buscan cesiones de aquellos hombres que no están siendo titulares y que quieren jugar. Este año esta el síndrome del Mundial y por ejemplo tanto Galletti como Coloccini están locos de cambiar de aires para poder entrar en los planes de su selección para la cita de Alemania. Cada día hay menos inversión y es que los directivos comienzan a escuchar las recomendaciones de sus técnicos.