El partido de los lamentos

Menos mal que está apretado el calendario! Lo digo por la ristra de partidos amistosos que llevamos desde que comenzaron las Navidades. Seguro que el homenaje de esta noche, después del año y medio del fallecimiento de Gil, también podía haber encontrado otra fecha. Y por lo visto antes del parón navideño, ni madridistas ni atléticos están para muchas fiestas. Exhibiciones las justas cuando no se da la talla en el campeonato. Y si es para recuperar el tono físico, mejor los entrenamientos. Pero como no quiero ser un aguafiestas, buscaré el lado positivo. Y ese vuelve a estar en la afición rojiblanca, que agotó en sólo unas horas las localidades. Mayor fidelidad no se encuentra en nuestro fútbol. Por encima de personas y etapas.

Tampoco le hubiera venido mal al encuentro el estreno de Cicinho. No es un jugador normalito porque nos impresionó ya el pasado verano en la Copa Confederaciones, pero tampoco lo era Robinho y ya ven cómo la vorágine que se vive actualmente en el Real Madrid se lo ha ido engullendo. Con la llegada del nuevo lateral también va a pasar un poco como con la de Baptista, y es que el técnico ha de sentar a clásicos del equipo titular para hacerle un hueco. Y eso cuesta mucho. Del Atlético, observaré más al entrenador que a los jugadores. O Bianchi tiene mucho cuajo o realmente no es consciente del drama en el que está metiendo a este equipo. Igual se puede jugar peor, pero resulta imposible sacar menos rendimiento a una plantilla tan completa.