Happy Christmas futbolero
Cada fin de semana en Inglaterra grandes grupos de aficionados se trasladan de un punto del país a otro. Van a ver a sus equipos jugar fuera de casa. Del Manchester, Liverpool o Arsenal viajan unos 5.000 a apoyar a los suyos. Hace 15 años, cuando había más espacio en los estadios, iban unos 10.000. Una vez le pregunté a un amigo fanático del Barça que había vivido en Inglaterra, por qué nunca viajaba a Valencia o Zaragoza a ver a su equipo. Me contestó: "Porque hay otras cosas en la vida. Aquí tenemos comidas familiares, salimos a tomar un café con amigos, nos vamos de paseo Los ingleses sólo tienen el fútbol".
Es triste pero creo que es verdad. Por eso ellos son tan fanáticos. Así se explica lo que en España sería inexplicable: cómo es que a lo largo de diez días se jugarán cuatro jornadas de la Premier. Sin eso, no sabrían cómo sobrevivir a estas fiestas navideñas. Incluso tendrían -horror- que hablar con sus hijos o sus esposas. No. Imposible. Por eso, para llenar el vacío futbolero del verano, tienen el críquet. Con partidos que duran cinco -sí, cinco- días. Para los ingleses hay deporte, ergo existen.