Don Alfredo sigue goleando

De juego sigue justito el equipo, pero al menos le ponen garra. Ocurrió contra el Betis y ayer en Noruega. Metieron el pie. Unos con menos torpeza que otros, pero metieron el pie. Y eso es justamente lo que pedía Di Stéfano tras el lamentable espectáculo dado en La Coruña. Las palabras de la leyenda viva del madridismo parece que han removido conciencias. Y no lo digo por la fea contestación de Guti, que parece seguir muy presente. De otra forma no se explica que el club, ayer mismo, utilizase su página web para remover el asunto con nuevas declaraciones del centrocampista. Hablo de que en Noruega, además de Sergio Ramos, mordieron otros muchos.

Porque este Madrid está para pocos trotes. El Rosenborg ha jugueteado con el descenso en la poderosa Liga noruega y ayer parecía el Chelsea. Seguro que no es motivo de orgullo para los socios ver cómo se ganó ayer, o el sábado en Sevilla, pero las derrotas bajando los brazos son peores. Desconozco si el regreso de los galácticos lesionados o las variantes de Luxa al famoso cuadrado mágico, pueden convertir un equipo peleón que las pasa canutas en un conjunto excelso que gana y da espectáculo. Me cuesta creerlo. Pero más difícil era que hicieran caso a Di Stéfano, y ya ven.