Tiempos mejores

Hay algo en esta Vuelta, competición al margen, que me está encandilando. En la llegada y en los hoteles te encuentras con ex corredores de la talla de Fernando Escartín, Abraham Olano o Hermino Díaz Zabala colaborando con la caravana ciclista. Por lo menos ya nos vamos pareciendo al Tour en algo. De esta gente siempre se aprende y que estén al servicio de la carrera es un paso hacia delante. Lo malo es que de estas conversaciones brotan algunos recuerdos que dejan al presente en mal lugar. Me vienen a la memoria esos duelos Escartín-Chava, que convertían el ciclismo en arte cada vez que la carretera se ponía a mirar al cielo. Eran tiempos mejores, donde cada etapa era una batalla y el espectáculo estaba asegurado.

Pero centrémonos en la carrera. Hay que hacer una mención especial al Comunidad Valenciana, que brilló con luz propia en la primera jornada de montaña. Un equipo sin estrellas que colocó a Carlos García Quesada y a David Blanco con los mejores y que plantó cara al todopoderoso Heras. Quizá fueron demasiado fogosos ya que encendieron los primeros petardos sin ser los más fuertes. Pero bueno, Belda es como es y casi mejor que no cambie... Este equipo va a ser de los que nos salve del aburrimiento. Dinero no les sobra, pero en ilusión no les gana nadie. Mientras tanto, vamos a ver si Mancebo y Sastre van a más y pueden recortar algo. Junto con Menchov, son los únicos que pueden sacarnos de esta apatía.