Ya tenemos a nuestro Stoitchkov
Se cerró la cuadratura del círculo. Al final se ha cumplido el objetivo principal, que no era otro que encontrar un delantero con garantías y reforzar las bandas y el centro del campo. Con la llegada del búlgaro Martin Petrov, del que únicamente me gustaría se pareciera a su compatriota Stoitchkov en la entrega incondicional al club que te ficha, nuestro juego no solo va a ganar en profundidad, será además, mucho más efectivo de cara al marco rival, porque este zurdo tiene gol. Petrov llega además en el momento oportuno, con mucha pretemporada por delante para encajar en el grupo. En anteriores ocasiones ha quedado demostrado que un jugador que se ha perdido estas semanas decisivas antes del arranque de la competición, ha tenido muchas más dificultades para adaptarse, no sólo al sistema de juego que planea el técnico, también a sus compañeros y hasta si me apuran al idioma o a la misma ciudad.
Carlos Bianchi, que en una de sus escasas declaraciones confesó que la llegada del búlgaro era prioritaria, tendrá tiempo suficiente para constatar su potencial y evaluar con precisión cuál puede ser la mejor contribución que puede hacer al bloque. Enrique Cerezo y Miguel Ángel Gil, con el decisivo concurso de Toni Muñoz, en esta ocasión sí han sabido estar a la altura del club que dirigen. Estamos hablando de jugadores con calidad contrastada que no nos han obligado a hacer un desembolso desorbitado. No todos los equipos de Primera pueden presumir del paciente e inteligente trabajo realizado en los despachos desde que acabó el Campeonato. El Atlético es, hasta ahora, el que más y mejor se ha reforzado.