Un lituano sabio y otro tricampeón
Para infortunio propio, el mejor pronóstico de la final lo había hecho Macijauskas: "He pensado mucho sobre la experiencia que acumulan ambas plantillas y creo que puede ser un factor de gran importancia". Diana. La metralleta lituana del Tau tuvo un día nefasto en el tiro, pero acertó de pleno en este vaticinio. El Maccabi, aparte de ratificar su gran capacidad encestadora, y algo más de garra defensiva de lo que se presumía, tuvo en la experiencia uno de sus argumentos claves. Controló la situación con serenidad, respondió con exhibición de triples a la cerrada defensa rival y aprovechó todos y cada uno de los obsequios del Tau, que fueron múltiples: balones perdidos, tiros precipitados...
Ante jóvenes con exceso de ansiedad y adrenalina, Jasikevicius hizo valer su clase... y el oficio. Tres de tres. Al rey Bodiroga le sucede el rey Saras.Volverá al Barça como se fue: con la corona europea en la frente. Y, por supuesto, con mejor sueldo. Bastante más de lo que no le quisieron dar para que continuase. Para el Tau, segunda final de Euroliga perdida. El Barça necesitó seis para su primer trofeo, y tres el Madrid. Querejeta y su gente volverán a la carga, aunque todo indica que en el banquillo ya no estará Ivanovic, sino Ettore Messina. Tampoco es manco.