Nos toca el papel de animadores
Este año, gracias al ProTour, el Giro de Italia va a tener la mejor participación en mucho tiempo, sobre todo en cuanto a los equipos alistados. Pero yo pienso que los lobos van a seguir siendo los mismos: los corredores italianos, porque los equipos extranjeros, incluyo a los españoles, van a llevar a esta carrera a los segundos espadas y para el triunfo final la pelea será entre ciclistas locales y, para ser más concreto, entre Cunego, Simoni y Basso. Y preciso un poco más: para mí el gran favorito es Damiano Cunego, porque es el futuro, porque se le ha visto en una gran forma en el Tour de Romandía y, porque a pesar de su juventud, ya ganó el año pasado. Está claro que no le falta experiencia. La tiene de sobra su compañero Gilberto Simoni, pero creo que esos 33 años le van a pesar en una carrera tan dura. Simoni, más que un rival, pienso que va a ser una ayuda crucial para Cunego. El año pasado ya demostró éste que, pese a salir como su gregario, estaba más fuerte que Simoni. Tras su tercer puesto en el Tour Ivan Basso irá a por todas en una carrera que le puede ir mejor, pero lo va a tener muy difícil contra tan estupenda pareja.
Alos corredores españoles les va a quedar el papel de animadores y no se debe esperar mucho más que esto. Ojalá me equivoque, pero no veo a ninguno ahora mismo con posibilidades de subir al podio. Ni siquiera Haimar Zubeldia, del que estoy convencido de que ha ido a este Giro obligado y que su mente estará en el Tour, lo mismo que Beloki. Pero tenemos gente con capacidad para ganar etapas: Aitor González, Unai Osa, Juanma Gárate, Samuel Sánchez... No pasaremos inadvertidos a pesar de no llevar las mejores bazas.