En España se vive muy bien

Los españoles discuten mucho. Se indignan más que otros europeos. Pero si hay una cosa que los une, si hay una idea que comparten casi todos, es esta: que en España se vive muy bien. David Beckham piensa lo mismo. No se harta el inglés de repetir lo encantado que está con la "spanish way of life". Al principio, cuando declaraba a los pocos meses de llegar a Madrid que le fascinaba el jamón serrano (el otro gran concepto que une a vascos, andaluces, catalanes, todos), uno se podía legítimamente preguntar si la Embajada Británica le había preparado el discurso. Pero en el último mes ha insistido tanto en el tema que no nos queda otra que creerle.

Ayer, en una entrevista emitida por Sky Televisión, Beckham profundizó en unas declaraciones que había hecho recientemente a Realmadrid Televisión. Dijo que, lejos de detestar el ajo, a su mujer, Victoria, le fascina la comida española. Hasta el extremo de que la Posh ha aprendido a cocinar la tortilla española. En cuanto a los hijos, resulta que el mayor, Brooklyn, vuelve del cole hablando cada día un mejor español. Esta circunstancia fascina a los padres, que dentro de muy poco se encontrarán en la alarmante situación de no entender de qué hablan los hijos. Todo esto, junto con el hecho de que de repente Beckham vuelve a jugar como en sus primeros tiempos en el equipo madridista, causa un problema serio a la prensa inglesa. Cada primavera, el culebrón que vende más periódicos es el que gira en torno a la siguiente pregunta: ¿volverá David Beckham a Inglaterra en verano? Mejor les iría ponderando el futuro de Michael Owen. Porque en cuanto a Beckham, no hay nada más que discutir.