Tenistas de multinacionales

Tenistas de multinacionales

Pedro Muñoz ve a todos los deportistas españoles lucir la camiseta de España y no entiende por qué los ahora suyos no lo hacen. Como no lo entiende, quiere poner remedio. Se va a meter en un lío. Los tenistas son una especie de multinacionales, galácticos cuya autonomía proviene de la ATP, no de las federaciones. Éstas tienen la representación del país en determinadas competiciones y, por tanto, los jugadores debieran expresar gráficamente a quién representan. Pero los nuestros no lo hacen. Anteponen sus intereses comerciales, por lo cual disputan la Copa Davis y los Juegos Olímpicos sin más identificación en su ropa que la de Nike o Sergio Tacchini, firmas que tienen contratados a nuestros mejores tenistas.

Muñoz trata de que hagan compatibles sus intereses con los de la Federación. No es un menosprecio para los jugadores. Todo lo contrario. El nombre de España vende. Tal es así que el año pasado la audiencia de fútbol la encabezó el España-Portugal (10,2 millones) por delante del Madrid-Barcelona (9,2); en baloncesto, el España-EE UU (3,7) barrió al Madrid-Barcelona de Copa (1,7); tenis con la Davis (3,1) y balonmano con el Mundial (3,5) han alcanzado audiencias millonarias. La misma Fórmula 1 ha conocido audiencias sin precedentes (4,8) porque de Alonso, quien lleva la bandera española en el casco, somos todos. Y, la verdad, nuestros tenistas no tienen razón para ser la excepción cuando juegan con España.