Portela ha perdido el norte

Portela ha perdido el norte

El board de la Euroliga, que no es otra cosa que la directiva de la citada competición pero a la cual le gusta llamarse así cualesquiera que sea el idioma que utilice, propone la libre circulación de jugadores. Basa su propuesta en que "el board ha considerado que las legislaciones políticas y sociales que rigen en los países de la Comunidad Económica Europea -Unión Europea desde hace años- imposibilitaban el mantenimiento de la actual normativa y aconsejaban la adopción de la libre circulación de jugadores como sistema de elegibilidad". En sus argumentos hace referencia a la sentencia Hamilton, jugador estadounidense que adquirió el derecho a no ser considerado extranjero por matrimonio.

En la Euroliga mandan Portela, presidente de la ACB, y Bertomeu, ex secretario general. De ellos parte la iniciativa de esta propuesta, que tiene mucho de razón. Caminamos hacia un deporte sin fronteras y cada club puede ser muy libre de contratar a los jugadores que quiera. Pero es un contrasentido que quienes reclaman "legislaciones políticas y sociales" para Europa las incumplan en su propio país, donde la ACB mantiene la obligatoriedad de que todos los clubes tengan contratados dos extranjeros. Es decir, para Portela en España no vale la libre circulación que permita a un club tener doce jugadores de las distintas comunidades españolas. ¿Es que aquí no rigen las leyes que él mismo defiende?