El quinto 'fichaje' de Camacho
Ronaldo ha sido el último fichaje de ese Mesías llamado José Antonio Camacho. Ahora entiendo porqué Florentino aseveró en la presentación del técnico que su principal virtud es que posee autoridad moral. Y tanto. Analicen despacio. Roberto Carlos deshizo las maletas que tenían al Chelsea como destino por un simple telefonazo del míster. Luego Zidane y Figo, después de analizar el nivel de exigencia del sucesor de Queiroz, llegaron a esta sabia conclusión: O dejamos nuestras selecciones o este año reventamos. Ya van tres fichajes de postín. El cuarto fue Beckham. El inglés se olvidó de su año de locura en la capital y convenció a Victoria de que se viniera con los niños a vivir a Madrid junto a él. Ya son una familia normal. Final feliz.
Y llegó el quinto, el que parecía más milagroso. Ronaldo sólo ha necesitado tres meses de relación con la bella Daniella para que el killer carioca entierre sus pinturas de seducción que lo habían convertido en un asiduo de la programación rosa por sus espectaculares escoltas (y escotes) femeninas. Se acabó el happy year y la barra libre alimentada por el desahogo ético de Queiroz. Esto es el Real Madrid. Todos llevan una vida más sedentaria y equilibrada. Y Camacho cuida orgulloso la manada. Por ahí empezará esta temporada el resurgir del gran Real Madrid de siempre.