El reto de Torres

Difícil se lo esta poniendo Sáez a Torres. Salir en los minutos postreros y con el partido cuesta arriba, no creo que sea el escenario ideal para dejar constancia del potencial que atesora. A la ansiedad que acumula la Selección con el marcador en contra y los minutos volando, se debe unir la del propio Torres, consciente de que es muy poco el tiempo que le dan para poder demostrar apenas nada. No voy a cuestionar la conveniencia de que sea o no titular indiscutible, simplemente reivindico la dificultad que entraña saltar al campo en las peores condiciones y con el reloj en la cuenta atrás. Él sabe que la Selección es su asignatura pendiente, su particular prueba del algodón. Triunfar en ella significa consagrarse y reivindicarse ante los que no profesan la militancia con sus colores.

A pesar de todo, seguro que aprovecha la exigua y cicatera oportunidad que le están dando. Ante Rusia dejó destellos de su clase. Poco pudo hacer en los atropellados minutos finales ante Grecia. Tal vez la gloria le espere en el choque trascendental de esta primera fase, el que nos enfrenta a los anfitriones. Quién sabe cuándo será. Lo que pocos dudamos es que será. La misma certeza que tenemos al calificar su actitud humilde cuando reconoce el liderazgo de Raúl. Nadie podrá reprocharle que se hizo un sitio a codazos. Su talento y perseverancia le colocarán donde debe de estar.