¿Cuántas emociones sentimos al ver un partido de fútbol?
Un experimento realizado durante el último Barcelona-Madrid tiene la respuesta... y confirma que sienta mejor ganar remontando Nominados Oscar mejor director 2019
El fútbol es capaz de movilizar nuestro cerebro mucho más que la mejor y más prestigiosa campaña de marketing o la última película de Hollywood. Esto, que seguramente ya lo tenías en cuenta por experiencia propia, ha sido confirmado esta semana en un experimento que tuvo lugar durante el último Clásico.
La empresa zaragozana BitBrain, dedicada a la neurociencia y a estudiar como nuestro cerebro genera sentimientos, fue la encargada junto con la agencia de publicidad Ogilvy de llevar a cabo un experimento pionero en España. Durante el pasado Barcelona - Real Madrid y aprovechando la retransmisión de TV3, colocaron a los comentaristas y aficionados del FC Barcelona, Joan Beumala, y del Real Madrid , Siro López, varios aparatos para medir la actividad eléctrica de sus cerebros y los movimientos de sus pupilas.
¿El resultado? Pues según cuenta la propia empresa en su web, han sido sorprendentes. Los dos periodistas registraron más de 6,5 millones de reacciones en los 90 minutos que duró el partido, y lo que es más importante, estas fueron mucho más intensas que cualquiera de los 20 millones de registros que tenía guardados BitBrain en su base de datos. Es decir, que lo de que el fútbol crea pasiones es una verdad como un templo, y además ahora sabemos que un templo muy grande.
Experimento de #neuromarketing del #clásico Barça-Madrid @tv3cat @bitbraintec @OgilvyES https://t.co/HxU4SSKdfp pic.twitter.com/jjX7dY4JmK
- Javier Minguez (@jminguezBCI) 5 de abril de 2016
El sufrimiento de un partido es una de las emociones más intensas
Lo que también quedó claro en el estudio, al igual que en otros experimentos del mismo tipo que se han hecho fuera del ámbito del fútbol, es que las emociones negativas las sentimos de forma mucho más fuerte que las positivas. Es decir, que la frustración por un gol del equipo contrario pone nuestro cuerpo mucho más al límite en lo que a sentimientos se refiere que la satisfacción de ver como tu equipo marca al rival.
Además, es curioso como nuestro cerebro registra sus picos de actividad en situaciones en las que no sabemos lo que va a pasar pero estamos a la expectativa de algo. Según BitBrain, las mayores sensaciones se registraron en momentos en los que sabíamos que podía pasar algo (como una falta de Cristiano) así como la racionalización de las jugadas en los momentos inmediatamente posteriores a que ocurrieran (por ejemplo tras el gol de Piqué), cuando nuestra mente gestiona lo que ha ocurrido.
Todo esto lleva a una clara conclusión, remontar partidos es el súmmum en lo que a sensaciones se refiere, al recoger toda la carga emocional de los tantos en contra y poner la guinda con los laureles de la victoria.