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MOTOGP | AUSTRIA

Todo al rojo Ducati en Austria

La casa de Borgo Panigale aspira en el Red Bull Ring, donde casi siempre gana, a la tercera victoria consecutiva de Bagnaia para tener algo que decir en la pelea por el título.

SPIELBERG
Bagnaia pilota la Ducati durante la carrera del GP de Gran Bretaña en Silverstone.
ADRIAN DENNISAFP

Si yo fuera el máximo responsable de Ducati en las carreras, cargo que ostenta Gigi Dall’Igna, reuniría a los ocho pilotos de mi fábrica que corren en MotoGP y les daría una consigna clara para la carrera de Austria de este domingo: acabar los siete que no se llaman Francesco Bagnaia por detrás de éste en el Red Bull Ring, donde casi siempre gana una de las motos de Borgo Panigale, sin permitir que ni Fabio Quartararo ni Aleix Espargaró acaben por delante de ellos. Es una apuesta fuerte y nunca vista antes, pero la forma más directa para que Pecco entre definitivamente en la pelea por el título que ahora mismo es sólo cosa de Fabio Quartararo y Aleix Espargaró.

Habrá quien diga que tanta orden de equipo es ir contra el espíritu de las carreras, pero si a finales del año pasado se hablaba de este 2022 como una copa Ducati en MotoGP, cuando se supo que tendría ocho motos en la parrilla, es hora realmente de que así sea. El italiano viene de ganar las dos últimas carreras y ha vencido en cuatro de las siete últimas, pero aún así estrá a 49 puntos del liderato que ocupa Quartararo, que a su vez le saca 22 puntos a Espargaró. Los Miller (compañero de Bagnaia en el Ducati Lenovo), Zarco, Martín (Prima Pramac), Bastianini, Di Giannantonio (Gresini), Bezzecchi y Marini (Mooney VR46) no tienen nada que decir en clave de título así que es hora de darle a su fábrica tanto como ella les ha dado a ellos, porque disponen desde hace tiempo de la mejor moto del campeonato, como mínimo la que más corre y la que mejor frena, dicho esto por los datos de telemetría y los especialistas de Brembo.

Evidentemente, Ducati difícilmente anunciaría una maniobra así, porque ni siquiera reconoció cuando en 2018 le mandaron a Lorenzo dejarse pasar por Dovizioso en Sepang, con el célebre mensaje en el dashboard del mallorquín de ‘Suggesting maping 8′, pero con 200 puntos en juegos a repartir en ocho carreras, y una desventaja de casi el 25 por ciento, es hora de activar todos los recursos posibles para pelear por el título hasta el final. Desde su entrada en MotoGP en 2003, la fábrica de Borgo Panigale sólo ha celebrado el título de pilotos de 2007, con Casey Stoner, y en un año en el que sus Bridgestone marcaron mucho la diferencia por encima de los Michelin, quedando instalado el sentir general en el paddock que con un piloto killer, un Lorenzo si le hubieran renovado, por ejemplo, hubieran ganado muchos más títulos.

A favor de Bagnaia y de toda Ducati juega que en el Red Bull Ring casi siempre gana una Ducati (no lo hizo en la primera carrera de 2021, que la ganó Binder bajo la lluvia con neumáticos de seco, y en la segunda de 2020, en la que se impuso Oliveira). En contra que Quartararo no estará por la labor de volver a terminar tan atrás como en Silverstone, donde fue octavo, y que Aleix ya debería estar más recuperado de su fractura en el talón del pie derecho, una lesión que condicionó su resultado de Inglaterra, donde fue noveno. A ver qué pasa, y todo ello con Marc Márquez como turista en el box del Repsol Honda. Ya queda menos para su reaparición,..