Schareina se estrena en un desafío Mundial
Las dunas de Abu Dhabi reavivan la lucha por un título al que aspiran el de Honda y Canet; mientras que en coches enfrentan a Al Rajhi y Al Attiyah.


Después de un intenso Dakar con sus más y sus menos para cada uno, toca hacer borrón y cuenta nueva... en casi todo. Porque la última parte del rally más duro del mundo, fue un buen aperitivo de lo que les espera a los pilotos a partir de hoy. La 34ª edición del Abu Dhabi Desert Challenge será un auténico mar de dunas, que arrancará con una prólogo de 14 kilómetros a la que precederan cinco etapas y un total de 1.200 kilómetros de lucha contra el crono, en la que los favoritos buscarán un desenlace común: el liderato de la general. Con el contador de nuevo a cero pensando en la victoria del próximo Dakar, el objetivo ahora para todos en general y Tosha Schareina y Edgar Canet en particular, pasa a ser un Mundial que no cambia de destino tras su visita al país árabe, pero sí incorpora novedades.
A pesar de ser un formato corto con tan solo cinco días de carrera (más la prólogo), la etapa maratón llega también a Abu Dhabi. Y además, lo hace en la etapa más extensa del recorrido. Durante cada jornada, los pilotos disputarán más de 200 kilómetros cronometrados, pero la cuarta superará los 300 y protagonizará el regreso de una maratón más conocida que el terreno para Schareina (que llega a ocho puntos del líder Daniel Sanders). Tras su segunda posición en el Dakar, el español se enfrenta por primera vez a las dunas de la capital de los Emiratos Árabes Unido pero con una versión prudente: “Es mi primera vez, pero tengo la oportunidad de luchar por el campeonato. Tengo que mantener la calma con los dos pies en el suelo porque esta carrera es más complicada, muy diferente a las otras, con solo arena y dunas. Quiero respetar esta carrera y aprenderla, pero también, por supuesto, luchar en cabeza”.
A pesar de mostrarse precabido, la competitividad acaba saliendo en un piloto que todavía se está recuperando de la lesión de clavícula que le pasó factura en el Dakar: “He pasado todo mi tiempo desde el Dakar concentrado en recuperarme de mi fractura de clavícula. Ha sido suficiente para evitar la cirugía. Obviamente no estoy al 100%, pero estoy listo para luchar”. Pero el de Honda se ve en una pelea donde, a pesar de no ser la suya, también se coló Edgar Canet. El piloto de KTM es la otra gran baza española en una edición con apenas aspiraciones de victoria en coches; pero muchas probabilidades sobre dos ruedas. La gran sensación del Dakar llega preparada a este desafío, con el objetivo de reafirmar su liderato en Rally 2; donde también competirá en Abu Dhabi... aunque se le espera entre los aspirantes de una categoría reina en la que Ricky Brabec y Cornejo son los más experimentados en este terreno.

Territorio familiar para Al Attiyah
“Sé que es un rally complicado de ganar porque tenemos auténticos especialistas con Nasser (Al Attiyah) y Yazeed (Al Rajhi)”, admitía a las primeras de cambio un Sebastien Loeb, que sabe muy bien a lo que se enfrenta en Abu Dhabi. A pesar de que la ambición del francés es llegar a lo más alto para pasar página de su despedida prematura del Dakar, la realidad es que esta carrera es un espacio reservado a los especialistas en las dunas como demuestran los antecedentes. Su compañero de Dacia ha ganado este rally en cuatro ocasiones y el vigente campeón del Dakar, se estrenó como vencedor en el Mundial en este mismo escenario durante la ronda de 2023. Pero todo puede pasar.
Al Attiyah llega a Abu Dhabi con “el objetivo de conseguir un cuarto título de campeón del mundo (sería consecutivo)” y para ello, el qatarí dice convencido que deben “ser inteligentes”. Pero la realidad es que tanto para él (a 22 puntos del liderato) como para Loeb, la dupla de Dacia, gran parte de las esperanzas en el Mundial llegan por pasar al ataque; si no quieren depender de un posible error de Al Rajhi en un momento donde el saudí, está midiendo mucho mejor los riesgos.
Esa nueva versión fue la que le llevó hasta lo más alto de un Dakar en el que para Ford brilló Mattias Ekstrom, que vuelve a la carga con una de las dos unidades del Raptor que habrá en carrera. La segunda será para Mitch Guthrie, con Carlos Sainz de vuelta a la competición en la próxima para mundialista. Pero hasta entonces, en cuatro ruedas, Pau Navarro y Eduard Pons en Challenger serán las bazas más destacadas de cara al triunfo español en este desafío por el desierto.
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