Quartararo es el sucesor de Márquez
El campeón paró los pies en las tres primeras vueltas a Bagnaia, que se cayó en la cuarta y dejó vía libre al de Yamaha camino de su tercera victoria.
Tenía que ser Fabio Quartararo y no otro el sucesor de Marc Márquez en su reino de Sachsenring. Apuntó maneras durante los entrenamientos, y muy buenas, Francesco Bagnaia, pero es de justicia que, con el ganador de las ocho últimas carreras en el dique seco por lesión, el que le sustituya en el trono germano sea el mejor. Y ése no es otro que el francés, que ha vuelto a demostrar que en estos momentos está muy por encima de la competencia.
El campeón paró los pies en las tres primeras vueltas a Bagnaia, que se cayó en la cuarta y dejó vía libre al de Yamaha camino de su tercera victoria del año. A diferencia de Montmeló, donde le tiró Nakagami, aquí Pecco se cayó solo. Fue en la curva 1, abriendo gas, cuando marchaba en la segunda plaza y empezaba a ver impotente que se le escapaba el francés, porque el de Yamaha tenía ya seis décimas de ventaja sobre el de Ducati.
El vigente campeón le empezó a comer la tostada al italiano desde la salida. A pesar de que Bagnaia partía desde la pole, era Quartararo el que salía en cabeza tras la primera curva y, cuando el de Ducati adelantó al de Yamaha en el arranque de la segunda vuelta, salía ligeramente colado tras la primera frenada y El Diablo recuperaba inmediatamente la cabeza, para no soltarla más y ganar, como previamente Guevara y Augusto habían hecho en Moto2 y Moto3, con una amplia diferencia en la meta.
El primero de sus perseguidores fue su compatriota Zarco, a cinco segundazos de distancia, y el tercero fue Miller, que se rehizo a una sanción de vuelta larga por caerse el sábado con bandera amarilla en la pista. Le ganó la batalla a Aleix, con problemas de neumáticos desde la salida y que ya antes tuvo que ceder la posición a Zarco en un apuradísimo adelantamiento que le hizo el francés en la rápida curva de derechas que da acceso al tobogán. A Miller parecía que lo podría contener, porque el australiano le pasó un par de veces colado en la primera frenada y el de Aprilia recuperaba la posición inmediatamente. Sin embargo, a tres vueltas del final el que se colaba era Aleix mientras sentía el aliento en el cogote del de Ducati, cayendo a una cuarta plaza que sería su posición final.
Con estas combinaciones, Quartararo es aún más líder tras la cita de Sachsenring y son ya 34 puntos los que le saca a Aleix, que marcha segundo con 27 puntos sobre Zarco, un clásico del podio, aquí como segundo, pero que aún no ha logrado la victoria. Con el que ya no hay que contar en clave de título es con Bagnaia, que se queda a 91 de distancia de un Fabio que aprovechó que era el Día del Padre en Fracia para dedicarle este inapelable y contundente triunfo a su progenitor.
Una las incógnitas sin respuesta que deja esta cita es saber cómo habría acabado el primer duelo entre Aleix y Maverick en lucha por posiciones delanteras con la Aprilia. Mack salía noveno y llegó a ponerse cuarto a rueda de su compañero, pero abandonó por avería en su moto. Se quedó hundida de atrás, al romperse el holeshot trasero, idéntico problema que tuvo Álex Márquez con la Honda y por lo que también tuvo que retirarse. Otro que enfiló el camino de boxes antes de tiempo fue Pol, pero en su caso porque no soportaba más el dolor de las costillas contusionadas en la caída del viernes.
En cuanto al resto de españoles, Martín fue sexto, por detrás de Marini, y le ganó su particular batalla a un Bastianini que esta vez sólo pudo ser décimo. Fernández acabó duodécimo y Mir se cayó a la vez que Bastianini, también en la curva 1, rematando así otro fin de semana nefasto para Suzuki, que perdió un soldado el sábado al serle imposible pilotar a Rins por las fracturas aún no recuperadas en su mano izquierda. Intentará estar en Assen la semana que viene. A ver quién para allí a Quartararo.