Katherine Legge, la mujer más rápida en las 500 Millas
La británica batió el fin de semana la maxíma velocidad de una mujer en la clasificación para la cita de Indianápolis con 231.070 mph.
La pasada clasificación de las 500 Millas de Indianápolis dejó el récord de Álex Palou, quien se alzó con la pole más rápida de la historia a una media de 234.217 mph (376,93 kilómetros por hora) que superó el anterior registro de Scott Dixon (234.046). Y también batió récord Katherine Legge, quien se convirtió en la mujer en realizar el mejor tiempo en las clasificaciones a la mítica carrera. La británica marcó en su tercera participación en las 500, una velocidad media de 231.070 que mejoraba la referencia que Sarah Fisher impuso en 2002 (229.439 mph) para ser la mujer con el mejor promedio de calificación entre las diez que han entrado al evento. “Estoy muy feliz de estar de vuelta y muy agradecida con el equipo”, explicó Legge tras superar el Last Chance y asegurarse una plaza desde la 30º posición de parrilla. Desafortunadamente en la última práctica se vio involucrada en un accidente con Stefan Wilson. El piloto del Dreyer & Reinbold Racing no podrá participar en la carrera a la que clasificó 25º (su coche lo pilotará el eliminado Graham Rahal pero saldrá último por cambio de piloto) tras fracturarse la 12º vértebra, lesión de la que fue intervenido durante el martes. “Ahora solo se queda centrarse en la recuperación y ya estoy mirando hacia 2024 y pensando en volver el próximo año. Esta carrera significa mucho para mí”, dijo el piloto accidentado antes de pasar por quirófano
De las diez mujeres que han tomado la salida en las 500 Millas de Indianápolis, un nombre destaca sobre todos los demás: Danica Patrick. La estadounidense es la mujer con más participaciones en la prueba, con un total de siete logrando seis top-10 y además tiene el honor de lograr la mejor posición de salida, cuarta en 2005, y la mejor plaza en meta, tercera ese mismo año. Además, durante su carrera logró liderar la prueba durante 29 vueltas.
La primera mujer en aparecer en el óvalo más imponente del mundo fue Janet Guthrie en 1977 tras no clasificarse en el año anterior. En 1978 logró su mejor puesto, un 19º. El camino abierto por Guthrie fue seguido por Desiré Wilson (quien no pudo clasificarse nunca para la carrera), Lyn St. James (siete participaciones con un 11º como mejor resultado en 1992 y la mujer de más edad en participar, en el año 200 con 53 años), Sarah Fisher (9 participaciones y 17ª en meta como mejor resultado), la mencionada Patrick, la venezolana Mika Duno, la suiza Simona de Silvestro, la brasileña Ana Beatriz Figueredo y las británicas Pippa Mann y Katherine Legge. Especialmente activa fue la aparición de las mujeres en el inicio de década del 2010. Ese año (Danica Patrick, Sarah Fisher, Ana Beatriz, Simona de Silvestro), 2011 (Danica Patrick, Ana Beatriz, Simona de Silvestro, Pippa Mann) y 2013 (Simona de Silvestro, Ana Beatriz, Pippa Mann, Katherine Legge) la parrilla de las 500 contó con la participación de cuatro mujeres.