“Gresini tiene una Ducati y, si Márquez llama a la puerta, es suya”
Carlo Merlini, del equipo Gresini, y Davide Tardozzi, del oficial Ducati, han charlado con AS en el paddock de Motegi sobre el futuro de Márquez.
Si hay un tipo en el paddock de MotoGP que sabe bien lo que es sufrir pérdidas personales y profesionales importantes, ése es Carlo Merlini, máximo responsable de la escudería Gresini de la que es propiedad Nadia Padovani, la viuda de Fausto Gresini. Merlini tuvo que afrontar en la maldita pandemia la muerte de su jefe y amigo, que le consideraba mano derecha e izquierda, y años antes la de dos de sus pilotos, Daijiro Kato (2003) y Marco Simoncelli (2011). Así, ahora da gusto verle sonreír en el paddock de Motegi consciente perfectamente de la importante posibilidad hay encima de la mesa para que Marc Márquez recale en su box la próxima temporada pilotar una Ducati de 2023.
Merlini y Davide Tardozzi, team manager del equipo oficial Ducati, charlaban tranquilamente entre las oficinas y los boxes de los equipos cuando AS les encontró y les fotografió en plena conversación. Conscientes de ello, sonrieron con complicidad y no tuvieron problema incluso en posar con este periodista, para luego charlar abiertamente sobre el temazo del momento, el futuro de Márquez.
Separando perfectamente lo que era conversación off the record de lo que sí se podía publicar, el máximo responsable del Gresini Racing MotoGP le ha dicho a este diario que “Gresini tiene una Ducati y, si Márquez llama a la puerta, es suya. Quién no querría tener a un piloto como él...”. Y el del Lenovo Ducati, por su parte, asegura: “Ducati ha acertado con su moto y con sus pilotos, porque tiene al primero, al segundo y al tercero de la general y, si puede tener también a Marc, pues sabemos que es muy bueno y ya veremos el año próximo qué es capaz de hacer si viene”.
Márquez depende de Honda
Ellos dos manejan información de primera y en Ducati dan por hecho hace tiempo que Marc quiere ir a correr con ellos en 2024, pero está por ver aún cómo resuelve su salida de Honda, marca que según ha podido saber este diario no le está facilitando la salida al ocho veces campeón tanto como dijeron en su día que harían llegado el caso...
“Honda respeta la opinión de sus pilotos. Nosotros no sentimos ningún miedo, pero respetaremos su decisión”, aseguró este año Koji Watanabe, presidente de HRC. Y Alberto Puig, team principal del Repsol Honda, declaró en la misma línea que “Marc tiene contrato, pero todo el mundo es libre de elegir en su vida. Honda no quiere mantener a gente que sea infeliz estando aquí”. A ver si es verdad y el ala dorada le hace feliz con una RC213V que le permita competir contra los mejores o le da la carta de libertad para cambiar de aires en 2024, porque clásula de rescisión no hay y la ruptura hay que hacerla de manera amistosa y de mutuo acuerdo por las dos partes.