Doble territorio Red Bull
El RB18 se destaca en las rectas en comparación con el Ferrari y Bakú y Montreal serán circuitos favorables para Verstappen y Pérez.
Ferrari dejó escapar dos ocasiones clarísimas, ambas desde la pole, en Barcelona y Mónaco. Ahora se enfrentan a un doblete extremo en lo logístico; de Azerbaiyán (este fin de semana) a Canadá (el próximo), que además será muy exigente en lo deportivo: llegan dos circuitos en los que velocidad punta es fundamental, porque están plagados de rectas, y en ese apartado Red Bull ha sido la referencia desde que comenzó la temporada. En el urbano de Bakú, la recta principal se estira hasta los dos kilómetros, la más larga del calendario. En Montreal, mientras tanto, el 45% de la vuelta transcurre con el acelerador a fondo.
El mejor indicador de las capacidades en recta de los monoplazas hasta ahora está en Jeddah Corniche. Allí, los dos RB18 lideraron la tabla de velocidades máximas en clasificación, con el DRS abierto. Pérez fue el primero con 335,1 kilómetros por hora y Verstappen, el segundo con 334,1 km/h. Los Ferrari F1-75, mientras tanto, estaban 11º (Sainz: 327,1 km/h) y 12º (Leclerc: 327,0 km/h) en esta clasificación de puntas.
Es cierto que el número está directamente relacionado con la cantidad de carga aerodinámica que están dispuestos a montar los equipos: conforme mayor es el alerón trasero, más agarre brinda en las curvas y menos desgaste genera para los neumáticos, a cambio de perder eficiencia al aire y, por tanto, velocidad máxima en las rectas. Pero es una tendencia en este 2022 que Ferrari se decante por niveles de carga superiores a los de Red Bull; quizás porque temen la degradación de los neumáticos. Sirva como ejemplo su elección en Miami: llevaron un alerón nuevo, más eficiente para las rectas, pero en el momento de la verdad, clasificación y carrera, terminaron utilizando el antiguo.
El año pasado la Fórmula 1 regresó a Bakú después de la ausencia en 2020, por la pandemia, con victoria de Pérez y podios de Vettel y Gasly. Fue una carrera dominada por Verstappen hasta que varios neumáticos de Pirelli reventaron sin previo aviso, por trozos de fibra de carbono en el asfalto, entre ellos uno de Max. Las banderas rojas propiciaron un entretenido ‘sprint’ final de dos vueltas. Es un circuito plagado de guardarraíles, así que se esperan banderas rojas y coches de seguridad aleatorios durante el domingo. Y si algo demostró el muro de ingenieros de Red Bull en Mónaco es que se adaptan mucho más rápido a los cambios y toman mejores decisiones en momentos críticos en comparación con los estrategas de Ferrari. Que se lo digan a Leclerc.