Evans vuelve a reinar en Roma, mientras que Cassidy se pone líder
El de Envision finaliza segundo la carrera tras hacer una buena gestión de la energía y da el primer paso en este esprint final por el campeonato.
Mitch Evans (Jaguar) firmó una actuación magistral, como viene siendo habitual en Roma (el año pasado se impuso en las dos pruebas), para alzarse con la victoria e hizo buena la pole conseguida por la mañana, algo que no se veía en el campeonato desde hace seis carreras. Además, se reengancha a la lucha por la clasificación general y se coloca a 20 puntos del liderato. Por su parte, Nick Cassidy (Envision) acabó segundo tras una buena gestión de la energía y se coloca en lo más alto del campeonato. Jake Dennis (Andretti) fue el principal perjudicado tras finalizar cuarto y perder el primer puesto del Mundial.
En los puestos cabeceros, la primera vuelta estuvo marcada por la cautela y sobre todo por la estrategia de los hombres de Jaguar. Mitch Evans, que salía desde la primera posición, cedió el puesto a Sam Bird (su compañero de equipo) para ahorrar algo de energía en las primeras vueltas. En contraste, el peligro se adueñó de la zona media en la segunda curva, donde Buemi se quedó al filo de un toque con Mortara y Günther. El que sí sufrió daños fue Pascal Wehrlain, tercer clasificado del Mundial. El alemán apuró la frenada y acabó perdiendo, no solo el alerón, sino prácticamente cualquier opción de alcanzar el título.
Dennis y Cassidy, los dos primeros clasificados en la general, partían séptimo y noveno respectivamente. Ambos aprovecharon el desorden de la primera vuelta para subir puestos, colocándose quinto y sexto. Desde ese momento, el británico y el australiano comenzaron a jugar “al gato y al ratón”. Aunque sin tomar riesgos excesivos. Sabían que cualquier fallo sería fatídico para el campeonato, y se trataba de una manera de presionar más que un intento de comenzar la batalla.
El primer tercio de carrera se desarrolló bajo una paz relativa. En este ePrix, la energía no iba a suponer tanto problema como en Portland o Berlín. Sin embargo, era un aviso de lo que estaba por llegar. La calma antes de la tempestad. En la vuelta 9, Bird perdió la parte trasera de su monoplaza y quedó cruzado en medio del trazado urbano. Buemi fue el primero en colisionar, mientras que el resto de pilotos rozaban los muros o impactaban ligeramente con el monoplaza en el intento de evitar un accidente.
El choque más peligroso se produjo con Mortara. El suizo fue incapaz de esquivar al Jaguar e impactó de lleno y a gran velocidad, lo que provocó una bandera roja que se extendió durante media hora. La carrera se reanudó con 7 coches fuera (Bird, Buemi, Da Costa, Mortara, Di Grassi, Frinjs y Lotterer), en lo que ha sido el incidente más peligroso de la temporada.
Dennis se mostró muy agresivo tras la relanzada y pronto consiguió auparse hasta la primera posición, mientras que Cassidy se quedó “encajonado” en la sexta posición. Aunque rápido se enganchó al grupo cabecero. En las siguientes vueltas, vino un baile de posiciones entre los cuatro primeros, que finalizó cuando el británico abrió más de un segundo y medio de ventaja. Sin embargo, lo que podía ser un buen mordisco del líder del campeonato, ha acabado convirtiéndose en una pesadilla para gestionar la energía a final de carrera.
El piloto de Andretti activó el modo ataque a falta de seis vueltas, pero no aumentó la distancia respecto a Evans, Cassidy y Günther. Los tres aprovecharon su oportunidad y con ese “extra” en su monoplaza adelantaron sin oposición a Dennis, que durante las dos últimas vueltas conservó, de manera agónica y como un mal menor, el cuarto puesto. Una posición que le hace perder el primer puesto de la general y le sitúa a cinco puntos del gran objetivo.
Pascal Wehrlain finalizó en séptima posición, mientras que Roberto Mehri fue capaz de esquivar los obstáculos, en forma de monoplazas, tras el fuerte accidente y consiguió su mejor puesto desde que llegó a la Fórmula E (12º). Una actuación que refuerza sus opciones de mantener el asiento la temporada que viene. Mañana, segunda carrera (15:03 en Eurosport2) y las espadas por todo lo alto.