Aleix ve peor la continuidad de Morbidelli que la de Miller

Tiene razón Aleix Espargaró cuando nos dice a los periodistas que le vamos a echar de menos cuando deje de venir a las carreras. El Mundial continuará, sin duda, porque sobrevive a cualquier retirada, pero es cierto que el de Aprilia es de los que deja perlas interesantes incluso cuando se quiere morder la lengua, como cuando AS le ha pedido su opinión sobre la posibilidad de que a Miller le haya salvado su pasaporte para seguir la próxima temporada en MotoGP, dentro del nuevo Pramac Yamaha. Para Il Capitano tiene aúj más delito la continuidad de Franco Morbidelli en las filas del VR46...

“No voy a comentar nada de eso, porque me meto en un charco y no me apetece meterme en charcos. Si te digo lo que pienso de eso y de otro que va a acabar en VR46... (se refiere a Morbidelli). Si te puedo dar mi opinión, porque me gusta mucho, de lo que ha hecho Aprilia con Ogura. Eso es jugártela y lo que toca. Un piloto joven, que está explotando y que nadie metía en la quiniela. Un team manager como Brivio coge a Ogura, así que chapeau. Eso sí que me gusta”, empezó diciendo.

Se le pidió que hablara del japonés, y lo hizo así: “Ogura me parece bueno, mucho. Me encanta. Tiene una manera de pilotar súper agresiva. Carga mucho el tren delantero. Cuando debutó en Moto2 ya me parecía que hacía cosas distintas. Es agresivo y me gusta mucho. Me parece un fichajazo para Aprilia”. Al preguntarle por Sergio García y Alonso López, que también sonaron para dar el salto, dijo de ellos: “También merecían una oportunidad. También son buenos pilotos, sin duda. Seguramente era menos arriesgado y nos hubiera chocado menos sus fichajes que el de Ogura, pero a mí me gusta mucho el fichaje de Ogura. Creo que es lo mejor que podía hacer el Trackhouse”.

¿Y Joe Roberts? También del estadounidense tiene su particular punto de vista el español: “Joe me cae bien y me parece que está haciendo un trabajo brutal en Moto2, pero hay trenes que pasan una vez en la vida, y a él le pasó. Yo estuve hablando con él en su motorhome y tenía la moto lista para subirse al cabo de dos días en el test de Jerez. Olé por él, que apostó por seguir y ojalá le aparezca el tren otra vez, pero no es fácil eso en este paddock. Me dijo que confiaba en él mismo y que creía que podía luchar por el Mundial de Moto2. Olé sus narices y su arrojo”.

AS volvió a preguntarle por el caso Miller, diciéndole que sin querer decir nada al respecto sí que había dicho mucho. Y se explayó: “Yo me llevo bien con Jack. Somos vecinos y acaba de ser padre. Me alegro de que pueda seguir en esto, porque le gustan las motos mucho más que a mí. Me alegro mucho por él de que pueda seguir corriendo aquí, pero es que no es sólo Jack. Para mí hay otro caso mucho peor. Cuando has tenido motos ganadoras durante mucho tiempo, no demuestras nada y te siguen dando opciones, pues ves a un Alonso López que se está mordiendo los labios por subir a MotoGP y que subiría aquí dándolo todo. Yo he decidido dar un paso a un lado porque tengo la sensación de que no estoy al mil por cien como pueda estar ese chaval el año que viene aquí, y para mí es suficiente”.

Le matizamos que el caso de Morbidelli es diferente, porque es un equipo el que apuesta por él, pero el de Granollers fue contundente: “Es peor. No tiene nada malo que siga Jack ni Morbidelli. Lo único que digo es que, cuando tienes una moto ganadora durante uno, dos, tres años, y tus compañeros de equipo te ganan todas las carreras y todos los cronos, no me parece justo que no le den la oportunidad para que suba a un chaval joven y sí a estos pilotos. Yo soy el primero para el que, si mi compañero de equipo me gana de paliza y las demás motos, para mí hubiera sido suficiente. Siempre lo he dicho y es mi manera de verlo, pero ya no entro en los pasaportes. No sé si a Jack le ha salvado el pasaporte o es porque es muy amigo de Campinoti. No tengo ni idea”.

Y dejó este mensaje para los que creen que hay demasiados españoles e italianos en la parrilla: “Sería más bonito, obvio, que hubiera 14 nacionalidades, pero esto es la élite y el deporte de élite tienen que estar los mejores, independientemente de su color, pasaporte o creencia”.