Hamilton pide mejoras
"Lo necesitamos ya, no dentro de tres carreras", dice el británico después de tres grandes premios difíciles para Mercedes. Wolff es optimista y cree que lucharán delante.
Hamilton ha ganado al menos un gran premio de Fórmula 1 todos los años desde que debutó en 2007. Eso revela que, al margen de su talento, siempre ha contado con un coche capaz de eso a lo largo de su carrera profesional. El Mercedes W13 aún no se muestra como tal, a pesar de haber subido dos veces al podio en 2022 (Lewis en Bahréin y Russell en Australia). Ferrari está en otra liga, Red Bull es sensiblemente superior y el coche no convence a ingenieros ni pilotos.
¿Se ve Hamilton capaz de luchar por el octavo título esta temporada? "Prefiero ser optimista, quedan 20 carreras y si eres realista, viendo cómo este deporte funciona y todos se desarrollan, los equipos ‘top’ avanzan a un ritmo similar. ¿Sucederá con estos coches también? Quién sabe, pero espero que lleguemos pronto a la pelea. Si todos mejoran, Red Bull dará un salto similar también y no será fácil. La desventaja es bastante grande ahora, pero queda mucho". En cualquier caso, el inglés de 37 años mete prisa a la fábrica: "Habrá muchas llamadas y mucho trabajo. Hacen falta mejoras, necesitamos que todos lo hagan, no nos dejaremos nada atrás y hay que asegurarse de que nuestra hambre sigue ahí. Habrá muchos ‘zooms’ con la gente del túnel de viento, para que revisen cada área en la que se pueda ganar rendimiento. Lo necesitamos ya, no dentro tres carreras. Estaré en el simulador".
"Hay un gremlin en el coche"
Toto Wolff, director de competición de Mercedes, se marchó de Australia reconociendo que caminan "con el pie izquierdo". "Hay un gremlin en el coche, o varios, y todavía no lo hemos encontrado. Pero esto es física, no mística", ilustra. El dirigente austriaco aún otorga a Mercedes un 40% de posibilidades de luchar por el Mundial, aunque eso implicaría resolver a partir de Ímola, con las mejoras que están en camino, tanto el exceso de ‘porpoising’ como la falta de prestaciones. "Resolver el ‘bouncing’ no encontrará un segundo de milagro, hay que ir a por muchas ganancias pequeñas y aun así soy optimista, creo que terminaremos llegando. Mi horizonte no es una carrera o un año, sino diez años, quiero mirar hacia atrás y ver a un equipo competitivo, habrá años más difíciles y este, sin duda, es uno de ellos".