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MOTOGP

Honda pide una "conversación profunda" con Michelin

Naufragio total de la marca este fin de semana en Mandalika: cuatro caídas de Marc, que recae en la diplopía, y un duodécimo puesto de Pol que no gustó nada.

Honda pide una "conversación profunda" con Michelin
WILLY KURNIAWANREUTERS

De ser los más rápidos en los test de Mandalika a naufragar en el diluvio universal. Ni una danza como la que se vio el pasado domingo en el 'pitlane' de Indonesia ayudaría a Honda a sacar la nube negra que se plantó encima de sus boxes durante todo el fin de semana. Y que, peor aún, parece que sigue sobrevolando sus cabezas. Además de no tener explicación para lo ocurrido en Indonesia, la peor de las noticias se ha confirmado con el anuncio de una nueva recaída de la diplopía de Marc Márquez. Un tercer episodio de visión doble provocado por su terrorífica caída durante el Warm Up que, además, le dejó fuera de la carrera por precaución.

Y, pese a que la lesión es "menos grave que la de noviembre 2021", su baja es, por el momento indefinida. Los médicos optan de nuevo por un "tratamiento conservador con pruebas periódicas", al igual que el pasado invierno, aunque con la esperanza de que su regreso pueda ser más temprano. Por ahora, paciencia y una nueva revisión la próxima semana. "El siguiente paso es centrarse en su recuperación. Ahora mismo queremos que descanse", comentaba este lunes Puig, antes de conocerse el parte médico del campeón.

Pendiente de cómo avance su diplopía, todo parece apuntar a que Honda tendrá que viajar a Argentina y Austin sin su caballito ganador en estos dos trazados. Catalogados como 'territorios Márquez', la marca del ala dorada viajaba con la esperanza de volver a coger la senda de la victoria o, al menos, dejar atrás esos problemas que apuntan al compuesto que Michellin llevó a Indonesia. Hay mucho que analizar, pero Pol Espargaró es ya la única baza de los japoneses para este primer doblete del año que, históricamente, se les ha dado muy bien. "Nunca hay nada normal en las carreras y nunca puedes predecir mucho lo que pasará. Vinimos aquí hace unas semanas, éramos rápidos y ahora somos lentos. Vamos a ver. Necesitamos entender qué pasó con el neumático Michelin, necesitamos tener una conversación profunda con ellos", apunta Puig, sin querer confiarse para las siguientes paradas.

Lo que está claro es que, en esta semana de descanso, hay mucho trabajo que hacer y, sobre todo, mucho que estudiar. Es evidente que el diluvio que cayó en Mandalika tampoco ayudó en absoluto a la marca, pero el fin de semana en general ya no fue bueno. "La sensación, hablando con franqueza, no ha sido nada buena", explicaba de manera tajante Alberto Puig, team manager del Repsol Honda, en su valoración habitual después de cada carrera. Y los motivos son muy claros: las caídas de Marc, el reasfaltado de la pista y, en especial, los neumáticos.

Problemas para Pol

El gran cambio que se vivió en el box a comparación de los test dejó una gran confusión en Honda. Pasaron de dominar con tiempos de récord a ser los más inestables de la parrilla. Todo por un cambio de compuestos y el reasfaltado de la pista que, además, acabó siendo crítico. Y es que ni siquiera la reducción de vueltas por el mal estado de la pista les benefició el pasado domingo. "En la pretemporada fuimos muy rápidos y luego, de repente, Michelin cambió el neumático y nuestra moto también cambió por completo. Todavía no entendemos completamente qué sucedió y tendremos que discutir profundamente con Michelin la situación de los neumáticos. Pasar de ser muy rápidos hace un mes a la situación en la que hemos estado este fin de semana, es muy difícil para nuestros pilotos y cuesta ser consistentes y tener confianza. En general, no podemos estar contentos", comentaba Puig.

Por si fuera poco, Pol Espargaró tuvo problemas con su casco desde la primera vuelta: "Parece ser que no podía ver bien". "Con una cantidad tan grande de agua al estar en un grupo de cuatro o cinco pilotos, si no puedes ver, no tienes ninguna posibilidad. No fue un buen resultado para él". El de Granollers no pudo mejorar un duodécimo puesto muy agridulce, especialmente después de ser el gran dominador de los test tan solo un mes antes. Ahora, con la baja de Márquez, toda la presión de la fábrica vuelve a recaer en él. La esperanza de Honda es que se trate de un caso aislado y que el regreso de Argentina al calendario de MotoGP tras dos años de pandemia, les regale una nueva victoria. Todo parece impredecible en este inicio de curso.