La descalificación más dolorosa
Wehrlein ganó con autoridad, pero una infracción técnica de su Porsche le descalificó tras la meta. Di Grassi hereda la victoria y Frijns sigue líder.
El Autódromo Miguel E. Abed de Puebla no tiene un Foro Sol como el Hermanos Rodríguez, una zona en la que el bullicio y la fiesta del público es inigualable, pero no se echó en falta en el regreso de la Fórmula E a México. Primero, por el entorno del circuito, a las faldas del volcán Popocatépetl y con un césped más propio de un campo de golf que de una pista de carreras. Y luego, por una carrera trepidante llena de golpes, acción y un final doloroso: Wehrlein ganó con autoridad, pero fue descalificado y la victoria cayó en manos de Di Grassi.
En la salida, el alemán conservó la primera plaza que logró en la Superpole por 58 milésimas sobre Rowland y 99 sobre Dennis, pero por detrás cambiarían las cosas, empezando por el británico de Nissan, que se quedó clavado en la salida. Vergne le esquivó con grandes reflejos, Gunther superaba a su compañero en BWM al llegar a la primera curva y el primer paso por meta se haría con el Safety Car en pista por un golpe de Cassidy contra el muro. Una vez retirado el Virgin, Wehrlein era el primero en abrir hostilidades con el 'Modo Ataque'.
Y Porsche y Pascal lo hicieron a la perfección, porque apenas perdió dos posiciones en la maniobra que recuperó pronto. Como en cada carrera, el doble paso obligado por esa zona era la clave, y más en este circuito en el que había que salir del recorrido para activarlo (como una 'long lap' de MotoGP). Wehrlein y su equipo lo sabía y gastó su último 'modo ataque' pronto, en cuanto pudo coger algo de espacio. Estrategia acertada mientras Frijns, que llegaba líder a México, sacaba de la pista a De Vries y Sims enviaba a Vergne al muro por delante.
Un incidente similar al último, entre Bird y Lynn, volvió a mandar al coche de seguridad a la pista. Se fue a 12 minutos (y una vuelta) del final y Wehrlein se marchó en la resalida mientras se anunciaba una investigación contra su coche por infracción técnica (la misma que Rowland, Buemi y Lotterer). Pascal siguió a lo suyo y cruzó la meta por delante de los dos Audi, que tuvieron un final de matrícula, pero la alegría le duró segundos: los que tardaron en sancionarle. Así, victoria para Di Grassi y podio de Rast y Mortara. Y sin saber cómo, Frijns se mantiene líder pese a ser 17º.