Ferrari empieza fuerte en un primer entrenamiento caótico
Manda Bottas, igualado con Hamilton y Verstappen. Leclerc y Sainz están cómodos en el top-6 y Alonso fue séptimo, aunque a medio segundo del SF21. Varios accidentes.
Ferrari deja muy buenas impresiones tras el primer entrenamiento libre del GP de Emilia Romaña en Ímola. Sainz lideró con el neumático duro y Leclerc se plantó entre los mejores en cuanto pudo rodar, ya en el último tercio de la sesión. El monegasco fue cuarto, a décima y media de Red Bull, y el madrileño fue sexto, a tres décimas, con leves errores en su vuelta rápida que lastraron su segundo sector. Pero las sensaciones son muy buenas, el SF21 fue rápido desde que pisó el asfalto y no pueden decir lo mismo rivales directos como McLaren y Aston Martin.
Delante, manda Bottas y eso quiere decir que Mercedes es más rápido que Red Bull. El finlandés, Hamilton y Verstappen terminaron separados por media décima, la igualdad es total entre los tres pilotos que se disputarán la victoria en Ímola. Pero no fue un libre agradable para el equipo austriaco, porque Sergio Pérez forzó una bandera roja tras un pinchazo incómodo que afectó su tren trasero. En la misma maniobra se quedó fuera el Alpine de Ocon, aunque los equipos deberán esclarecer el incidente (que la FIA investiga) porque no hay imágenes de televisión.
Fernando Alonso colocó al Alpine séptimo, a medio segundo de Sainz. Hay una frontera en la zona media y el antiguo Renault aún parece formar parte del segundo grupo. Con todo, las vueltas salen y los primeros kilómetros son más satisfactorios que en Bahréin. El A521 estrena varias novedades aerodinámicas que el asturiano y su compañero francés testaron en este entrenamiento. Hubo dos banderas rojas: la citada de Checo y Ocon y un accidente de Mazepin en la entrada del pit lane que causó daños severos en el Haas. El ruso no levanta cabeza y casi sale a accidente por jornada.