Carlos Sainz entona a Ferrari
El madrileño debuta con el SF21 en los test con el quinto mejor tiempo del día bajo una tormenta de arena. Verstappen, Norris y Ocon, los más rápidos.
Bajo una tormenta de arena, Carlos Sainz se puso el mono de trabajo para debutar oficialmente al volante del Ferrari SF21, y las sensaciones son muy buenas, todo lo buenas que pueden ser en unos entrenamientos de pretemporada. El madrileño completó 57 vueltas en la sesión vespertina de este viernes, se fajó con el compuesto duro de Pirelli y mejoró al final en cuanto montó la goma intermedia (el equivalente al blando en el GP de Bahréin). La pista de Sakhir estaba para pocas bromas, en plena ventisca de polvo, pero el monoplaza rojo y burdeos respondió con el quinto mejor registro de la jornada.
Los tiempos, en cualquier caso, no son representativos: se rodó a más de dos segundos de la pole de 2020. Sí es representativo el poderío que mostró Red Bull en esta primera jornada con la vuelta rápida de Max Verstappen y las 139 vueltas que completó el holandés. Estuvo a la zaga el Alpine de Esteban Ocon, 129 pasos por meta en su caso y a sólo cuatro décimas de un coche teóricamente superior. Verstappen y Ocon no rotaron, rodaron solos todo el día y la paliza a 30ºC es notable. Se coló entre ambos el McLaren Mercedes de Norris. Por la mañana mandó Ricciardo, el coche de Woking es sólido aunque el británico firmó varios errores menores.
Mal día para Mercedes
Faltó Mercedes, y eso es noticia y preocupante para Brackley. Su coche será la referencia este año, no cabe duda, pero una avería en la caja de cambios a primera hora les dejó sin apenas kilometraje en la franja matinal. Bottas dio seis vueltas y cerró la clasificación, Hamilton sí pudo desquitarse más tarde con 42 vueltas, pero le tocó hacer el trabajo sucio de correlación entre fábrica y pista, poco agradecido y muy aburrido para un siete veces campeón. Qué remedio. Varios errores impropios de Hamilton cerraron la jornada, con pasadas de frenadas en un asfalto casi impracticable.
Por lo demás, una bandera roja de Ferrari cuando Leclerc se quedó tirado, aparentemente nada grave (porque Sainz salió por la tarde sin problemas) y buen día para todos excepto los Mercedes y Mick Schumacher, que lidió con las averías matutinas del Haas. Mazepin tuvo más suerte y medios para iniciar su andadura en la Fórmula 1. Con todo, fue más rápido que el coche americano-ruso el mismísimo Roy Nissany, que compró un día de test a Williams y dejó sentados a Russell y Latifi.