"Marc Márquez ridiculizó al resto en Jerez con su remontada"
"La mayoría de pilotos actuales necesitan trabajar más y congratularse menos para competir contra Marc", asegura Casey Stoner.
Renovación de Marc Márquez con Honda hasta 2024, la separación de Andrea Dovizioso y Ducati, el 'descenso' de Valentino Rossi al Petronas Yamaha SRT... Más allá de los arduos contratiempos que ha provocado el coronavirus en el Mundial de MotoGP, 2020 ha sido un año donde los aficionados a las dos ruedas han conocido varias noticias que a buen seguro podrían ocupar posiciones muy destacadas si realizásemos una clasificación acerca de los bombazos más destacados que se han producido en la última década en el campeonato.
En este sentido, un suceso como la imprevista retirada de Casey Stoner no podría faltar en esta particular tabla dada la magnitud que supuso para la competición decir adiós a un bicampeón que decidía en plena madurez deportiva colgar los guantes y el casco cansado del ambiente que reinaba en el paddock.
Ahora, ocho años después y con una grave enfermedad diagnosticada como la fátiga crónica que le ha obligado a cambiar sus hábitos, Stoner repasa en una entrevista en 'El Mundo' varios aspectos que han sido actualidad a lo largo de la temporada, como por ejemplo, el gran vacío que ha causado en la parrilla de la clase reina la lesión de Marc Márquez.
Mundial de MotoGP: "Se ha perdido el respeto por la competición. Ahora todo el mundo en el paddock quiere sangre. Para mí todo cambió cuando falleció Marco Simoncelli, en octubre de 2011. Durante un mes todo el mundo estuvo muy apenado y nos respetamos, pero después volvió la guerra en Malasia 2015. Se necesitaría un dirigente con mano dura. Habría que fijar unas normas estrictas para los próximos 10 años, arrebatar el poder que tienen actualmente los fabricantes y los pilotos, que son egoístas por naturaleza, y cambiar más cosas. Por ejemplo, no entiendo que se disputen tantas carreras en España. Es algo que no ocurre en la Fórmula 1, no parece un Mundial".
Ausencia de Marc Márquez: "Este año, sin Marc, nadie ha estado a un gran nivel. Quartararo, Viñales y Dovizioso podrían haber ganado el título, pero se perdieron en el camino. Y me ha sorprendido ver que, pese a los errores que cometían, muchos pilotos seguían sonriendo. No entiendo por qué. En mi época no era así. Los pilotos actuales son muy conformistas: están satisfechos con los comentarios que reciben en Instagram y lo que ocurre en pista no les afecta tanto. Excepto Marc, nadie trabaja lo suficiente. Si se hubiera recuperado con paciencia y hubiera corrido la mitad del Mundial, hoy sería campeón. Este año se ha demostrado lo superior que es. Antes de su caída en Jerez, su remontada ridiculizó al resto. La mayoría de pilotos actuales necesitan trabajar más y congratularse menos para competir contra Marc".
2021: "No creo que alguien consiga estar al nivel de Marc, pero puede ocurrir. Por mi experiencia creo que se puede mejorar mucho en invierno. Recuerdo que en mi segunda temporada en MotoGP, en 2007, nadie daba un duro por mí, pero trabajé más que nunca, me dediqué como nadie, cambié incluso de estilo de vida y acabé ganando el Mundial con Ducati. Quizá alguno de los pilotos cambia el chip este invierno y veamos otro campeonato".
Rival favorito: "Lorenzo fue un rival importante en mi carrera, pero me quedaría antes con Dani. Corrimos juntos en 125cc y 250cc y muchos años en 500cc. Me gustaba mucho su estilo porque era muy respetuoso y cuando ganaba sabía por qué me ganaba. Otros pilotos podían superarme por la moto o por otras circunstancias, pero cuando Dani iba rápido era imparable. Fue un placer que fuera mi rival".
Enfermedad de la fatiga crónica: "Antes pasaron meses en los que sentía que mi físico se deterioraba sin motivo aparente: iba a entrenar y volvía reventado. Fui al médico y al principio lo enfoqué mal. La fatiga crónica no tiene cura, pero pensé que yo la encontraría, que entrenaría más que nadie y saldría adelante. Pero la verdad es que esta enfermedad me está destrozando y no puedo con ella. Pasé los primeros seis meses de este año yendo de la cama al sofá y del sofá a la cama. Apenas me podía levantar para comer. Ahora estoy algo mejor, he aprendido a gestionar mi energía. Es difícil de explicar. Empiezo el día al 50% y va bajando hasta que me quedo vacío. Una de las cosas más desesperantes es que aunque eche una siesta la energía no se recupera hasta el día siguiente. No hay manera. Todo esto me ha hecho replantearme mi vida. Antes disfrutaba, salía en moto, iba a pescar e iba a jugar a golf y ahora simplemente voy tirando. En los días buenos aprovecho para jugar con mis hijas y si acaso voy a jugar al golf. Pero con el carrito de golpe a golpe y quedándome exhausto en el sofá los días posteriores. Sólo he montado en moto dos veces en los últimos dos últimos años y pescar… Uf, ya no sé ni cuando fue la última vez que fui a pescar".