¿Qué es el modo fiesta de la F1 y por qué lo prohíben?
A partir de Monza, la FIA prohíbe emplear el modo de clasificación en los motores. La medida puede equilibrar las clasificaciones, aunque afectará a todos.
Hamilton lo bautizó como "modo fiesta", aunque cuando Ferrari inventó algo parecido le asignó el calificativo de "modo jet". No hay reactores ni matasuegras en esta característica técnica de la Fórmula 1 actual que la FIA prohibirá parcialmente a partir del GP de Italia, esta semana, en Monza. Se trata del mapa de motor que más prestaciones extrae de la unidad de potencia, por encima de los 1.000 CV. Exprime los esfuerzos de todos los componentes, pero acorta la vida útil del propulsor y es muy difícil, para los comisarios, calibrar su legalidad. Por eso, a través de una directiva técnica, la FIA confirma que no se podrá hacer una diferenciación entre los mapas de motor utilizados en clasificación y carrera.
Para empezar, ¿qué es un mapa de motor? Estos propulsores, compuestos por un motor de combustión, dos eléctricos, baterías o centralita, incurren en complejas programaciones eléctricas para ajustarse a las necesidades del piloto en cada momento. Puede haber hasta una decena de configuraciones que varían entre las más fiables y las más agresivas sobre la mecánica, unas para conservar y las otras, para atacar. El 'modo fiesta' sólo se usaba los sábados y apenas unas pocas vueltas. Hay otras funcionalidades, como el llamado "botón de adelantamiento", que accionan los pilotos para obtener más potencia puntual a partir de las baterías.
Toto Wolff, jefe de Mercedes, explica bien su utilización: "En función del circuito, siempre cambia el modo que utilizas y la influencia que tiene en la carrera. No utilizábamos el llamado 'modo fiesta' en todos los circuitos. Hace mucho daño al motor y reduce su vida útil. Si puedes evitarlo, no lo utilizas. Dicho esto, nos impactará de alguna forma empezando por Monza, pero no dudo que será lo mismo para todos los fabricantes". El austriaco desliza que Mercedes saldrá ganando con su prohibición, porque "restar un par de vueltas de 'modo fiesta' se traduce en unas 25 con más rendimiento para la carrera". Pero en clasificación, Red Bull puede acercarse a la cabeza. Honda y Ferrari son los dos suministradores de motores que menos extra de potencia ofrecen para el sábado. En el caso de Renault, se estima que McLaren y el equipo oficial perderán un par de décimas.
Se prohíbe porque la FIA tiene una veintena de técnicos y los equipos, miles de ingenieros, y no siempre es posible registrar a través de sensores todo lo que sucede dentro del motor híbrido. Desde utilizar el lubricante como aditivo para la combustión hasta alterar el flujo de combustible permitido (lo que se sospecha que hacía Ferrari), los rumores del paddock sobre la legalidad de las prácticas son variados. Los monoplazas no volverán a ser tan rápidos a una vuelta, pero si la medida contribuye a equilibrar una parrilla tan desigual, bienvenida sea. El mejor lugar para comprobar si la decisión tiene efectos positivos es, precisamente, el Templo de la Velocidad de Monza.