Yamaha: un trabajo de más de 300 días para destronar a Honda

"Empezamos a cambiar antes del pasado verano, en Montmeló. También cambió mi mentalidad. No sabía por qué no tenía resultados. Necesitaba concentrarme en el principio de carrera. El año pasado demostré a Yamaha que soy quien puede evolucionar la moto". Esta es la confensión que ha hecho Maverick Viñales en la cuenta oficial de Yamaha en 'Instagram' tras ser preguntado por las evoluciones que los técnicos de Iwata han introducido este invierno en la YZR-M1.

Unas mejoras diseñadas para mejorar el agarre, la aceleración y la degradación de los neumáticos de la montura japonesa que comenzaron a desarrollarse hace más de 300 días en el test de Montmeló 2019. A orillas del Besós, la marca de los diapasones, cansada de perder contra Honda y Marc Márquez, decidió cambiar su estrategia. Sin poder aumentar la potencia de su motor hasta 2020 debido al congelamiento que sufre este elemento antes de la primera carrera, Yamaha decretó que tanto los pilotos oficiales como los satétiles focalizasen toda su segunda jornada de trabajo en afinar la electrónica, uno de los aspectos con más relevancia en el Mundial de MotoGP y pieza fundamental para resolver los contratiempos ya mencionados al principio de este párrafo.

Una nueva hoja de ruta liderada por Michele Gadda, considerado uno de los 'gurús' en este apartado en el paddock de la clase reina, cuyos primeros resultados comenzaron a ser visibles en la última parte del campeonato, principalmente con Maverick y Fabio Quartararo, si bien no ha sido hasta el test de Sepang y Qatar 2020 y el estreno de la nueva versión de su propulsor cuando Franco Mordibelli y Valentino Rossi han dado también ese paso adelante que ha posicionado a la moto de la prefectura de Shizuoka, si el coronavirus lo permite, como una de las máquinas a vencer esta temporada.

"Nos hubiera gustado mejorar un poco la velocidad punta, pero no tendremos mucho espacio debido a la congelación del motor. El paquete de este año parece ser muy bueno. Todavía estamos un poco cortos de velocidad punta, pero hemos mejorado tanto la potencia como el agarre", asegura Massimo Meregalli. "Al acabar el test de Qatar, me fui con la sensación de que había acabado bien. En el pasado, me faltaba algo, adelantar o algo. Ahora veía la moto suficientemente preparada para luchar. Está bien en todo. La moto iba bien, lo vimos también con Valentino, Fabio o Morbidelli. Hay que llegar a Brno con la mentalidad perfecta. Aún hay que mejorar mucho. En Sepang, sólo hice un día bueno; el otro probé muchas cosas. También en Qatar sólo hice una vuelta a tope. Cuando pueda, iré con la R1 a entrenar", amplía el de Figueras.

Así mismo, el campeón de Moto3 afirma que será interesante analizar su rendimiento en caso de que el Gran Premio de la República Checa 2020 sea la cita inaugural de la temporada, así como destaca la importancia del fichaje de Esteban García: "Si empezamos en Brno y Austria, donde no solemos ir muy rápido, será interesante ver si vamos bien. Lo que me convenció para renovar fue la confianza que Yamaha me dio en los últimos tramos de la temporada pasada. Además, ya tengo a mi equipo allí. No quería otros cambios, quería estabilidad. Me siento muy fuerte con mi moto. Tienen todo para mejorar la moto. Nunca es fácil. Ahora son ya tres años con Yamaha y no logré lo que quería, pero tenemos confianza. Espero mucho de este Mundial. Si no se corre, iremos a por el siguiente. Será como en la segunda parte de la temporada pasada. Marc Márquez, delante; Fabio Quartararo, también Dovizioso. Habrá más, como Suzuki, que está trabajando bien, o Miller, que hizo un buen ritmo. Me siento muy bien con Fabio. Nos puede dar mucha información. Es muy bueno a una vuelta. Le damos la bienvenida. De todos modos, estoy algo triste por perder a Valentino, pero estoy aún más motivado si Fabio está ahí. Cada semana nos llamamos todos. Compartimos ideas, mantenemos el contacto, todos están bien. Fue muy importante la llegada de Esteban García. Necesitábamos aire fresco, cambios. Fue lo correcto. Nos da mucha positividad y nuevas ideas, junto con el 'staff' japonés. Para mí, es mucho más que mi jefe de mecánicos. Es muy inteligente. Lo importante es que todos están felices. Es importante si Jorge puede probar cosas nuevas en un gran premio. Después de Moto2, hay piezas que no se pueden probar. Nos puede dar buenos comentarios sobre otras motos".