NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

FÓRMULA 1

Leclerc: "Todavía me resulta difícil creer que estoy en Ferrari"

Aunque haya completado ya una temporada vestido de rojo, el monegasco reconoce que cada vez que viste ese color le cuesta creer que sea piloto de Maranello.

Actualizado a
Charles Leclerc.
Charles CoatesGetty Images

Entre carreras virtuales y directos de 'Instagram', así pasan el tiempo muchos pilotos estos días en los que no se puede salir de casa y hay que ocupar el tiempo de la mejor forma posible. Uno que se ha apuntado a las dos cosas es Leclerc, participando en las competiciones que organiza la F1 y en charlas como la que tuvo con los fans de Ferrari, en la que habló de cómo pasa estos días: "Tengo equipo en casa, una bicicleta, algunas pesas… En Mónaco tenemos la autorización para realizar actividad física durante una hora al día al aire libre, nos conviene".

Ante su segunda temporada en Maranello, el monegasco reconoce que todavía le cuesta creer que es piloto de Ferrari: "Aunque haya he estado con Ferrari un año, cada vez que uso un traje o una camiseta roja es especial, siempre me resulta difícil creer que estoy aquí". Y es que es un sueño cumplido. "Tenía 11 o 12 años la primera vez que estuve en Maranello. Estaba con Jules (Bibanchi) y no pude entrar en Ferrari porque no tenía pase, pero recuerdo que lo vi desde fuera y quedé muy impresionado. Soñaba con estar ahí algún día", recuerda.

Y ahí está. Además, su primer año ya le valió para ser la clara apuesta de presente y de futuro para los italianos. Por eso no cambiaría nada de él: "¿Cambiar algo? No, cometí errores, pero me convirtieron en el piloto que soy ahora". Y resume en una palabra la que mayor lección que aprendió: "Paciencia. Es algo que me costó aprender en el pasado, pero al estar en Ferrari aprendí que lo necesitas, no puedes tenerlo todo e inmediatamente y debes tener un poco de paciencia y aprender de los mejores, de Sebastian (Vettel) y del equipo".

"Las cosas necesitan tiempo para calmarse y, por lo tanto, a veces es necesario esperar y tal vez era demasiado impaciente", añade en ese sentido. Y para acabar, menciona a dos ilustres. Uno como su ídolo: "Michael Schumacher. Cuando era pequeño él ganaba mucho y era impresionante. Cada vez que veía la F1, él y Ferrari eran a los que más seguía". Y otro como su sueño: "Sería un sueño para mí competir con Senna, me inspiró mucho por el trabajo y el talento que combinó para convertirse en el mejor".