Golpe en las dunas de Sainz: repite victoria y es más líder
El madrileño marcó la diferencia con el Mini en las primeras grandes zonas de dunas del rally y deja a Al Attiyah a 6 minutos. Alonso, séptimo con el Toyota.
Una vez superado un tercio del Dakar con las cuatro primeras etapas, la quinta dio comienzo a otra parte importante de la prueba. Porque entre los 353 km de especial entre Al Ula y Hail ya comienza a cambiar el paisaje, se podría decir que fue un día de transición en el que se combinó lo que había el rally hasta ahora y lo que va a ser a partir de aquí: una primera parte de pistas llenas de piedras y una segunda de dunas con abundante hierba de camello. Un aperitivo de mucha arena que puede marcar lo que esperar después… y pinta muy bien para Sainz.
Al Igual que en las motos, los coches ya tienen al primer piloto en repetir victoria: el madrileño. Y eso que no empezó la etapa demasiado bien cediendo dos y minutos y medio en el primer paso por el Km 51 por un pinchazo que les ralentizó, pero a partir de ahí voló. Fue recortando distancias en cada paso con Al Attiyah, su único rival en la lucha por la etapa después de que más pinchazos dejasen fuera de juego a Al Rajhi y Peterhansel. Y al llegar a meta, el catarí se encontró con tres minutos perdidos sobre Sainz cuando empezó sacándole uno. No abría pista y se notó.
El resultado es que el mano a mano entre Carlos y Nasser, porque con Peterhansel a casi 18 minutos lo podemos llamar así por ahora, vuelve a dar una mayor ventaja al de Mini con seis minutos después de que el de Toyota se le acercase a tres el día anterior. Terranova cerró el Top 5 tras los pilotos mencionados y el siguiente coche del Gazoo Racing fue De Villiers, sexto. ¿Y qué pasó con Alonso? Pues que regresó a la buena senda con un séptimo puesto cediendo algo más de doce minutos con su amigo madrileño.
Puede que a priori parezca un resultado que no valga para lanzar las campanas al vuelo, pero Fernando lo catalogó después como la mejor etapa que había hecho hasta el momento en los raids. ¿El motivo? Que dos pinchazos le lastraron al principio y luego recuperó mucho terreno en las dunas, donde se siente más cómodo. Así que después de una etapa tan difícil como la que vivió el jueves, el asturiano se volvió a encontrar con un ritmo competitivo, algo que necesitaba para encarar lo que queda.
También volvió a la normalidad Roma tras las cinco horas que perdió en la anterior etapa al quedarse sin ruedas de repuesto por numerosos pinchazos. Fue 13º con el Borgward. Y el español que protagonizó la peor noticia fue Xavi Foj, que en su 29º Dakar tuvo que abandonar por un problema con el turbo de su Toyota Land Cruiser. El reto de mañana se compone de 478 km de especial de Hail a Riad repleto de dunas antes de tomarse un merecido descanso.