Motor nuevo para Carlos Sainz, una ventaja en el 'sprint' final
Como saldrá último en Brasil, McLaren estrena una unidad de potencia sin penalización efectiva. Mecánica fresca para las dos últimas carreras del año.
Era lo más probable y ha terminado por confirmarse: motor nuevo para Carlos Sainz a partir del GP de Brasil. Como saldrá último por la avería electrónica de su unidad de potencia en la clasificación, los puestos de penalización no serán efectivos y disfrutará de un propulsor fresco, a estrenar, para las dos últimas carreras de la temporada. En Interlagos sale a remontar, "ataque máximo mientras lo permitan los neumáticos", y en Abu Dhabi sí podrá confirmar esa ventaja contra sus rivales habituales al disfrutar de una mecánica con menos kilometraje. Algo similar a lo que ha hecho Honda desde Suzuka (sus cuatro pilotos tenían dos motores de última generación cada uno) o Leclerc (que cambia motor también en Brasil).
Usa su sexto motor de combustión, su quinto MGU-K, MGU-H, turbo y batería y su cuarta centralita. Todos son de la cuarta especificación fabricada por Renault, la que en teoría resolvía ciertos problemas de fiabilidad aunque no incluye importantes mejoras en prestaciones. No obstante, frente a una parrilla con unidades al límite de su kilometraje, sí deben apreciarse progresos en todos los apartados relativos a la potencia.
El madrileño marcha séptimo de la clasificación de pilotos a cuatro puntos de Albon (Red Bull) y con tres sobre Gasly (Toro Rosso), que está acabando bien la temporada ayudado a su vez por el inicio de curso en Red Bull. El objetivo es luchar por la sexta plaza hasta el final, aunque también no perder la séptima frente a los dos compañeros de Verstappen en 2019.