Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

F1 | MÉXICO

¿Es real, y legal, la ventaja del motor Ferrari sobre Mercedes?

La principal diferencia está en la arquitectura de las baterías, pero en la casa alemana no se interesan por el diseño de Maranello y tienen motivos.

Mexico City
Lewis Hamilton (Mercedes W10) y Charles Leclerc (Ferrari SF90). F1 2019.
MIGUEL MEDINA

México es un desafío para la potencia de un Fórmula 1. La recta del Autódromo Hermanos Rodríguez, el circuito que recibe este fin de semana al 'Gran Circo', supera los 1.200 metros en condiciones que ponen a prueba a los propulsores: la ciudad está a 2.000 metros de altitud así que la cantidad de oxígeno en el aire es menor. El turbocompresor debe realizar un trabajo extra y su calidad y eficiencia son claves cuando el pedal del acelerador se pisa a fondo. La prueba del algodón, la mejor forma de medir si Honda está a la altura de Renault, si Renault está muy lejos de los grandes y si Ferrari ya ha superado a Mercedes.

En cuanto a este último interrogante, la sensación en el 'paddock' es que sí, pero con matices. Toto Wolff, director de competición de los alemanes, ha instigado el debate subrayando la "enorme ventaja en recta" del motor de Maranello según sus datos de GPS, una teoría que secunda Hamilton pero que no aprueba Binotto: "Nuestra velocidad punta también viene del chasis", con un diseño muy eficiente al aire que genera menos apoyo aerodinámico en curva, pero al mismo tiempo menos 'drag' (resistencia al aire en recta).

La unidad de potencia de Ferrari ha dado un paso adelante en 2019 y la FIA no ha encontrado ilegalidades en él, porque no existen o porque no han buscado más. Del célebre consumo de aceite en el 'modo fiesta', nada. Del máximo permitido de entrega de energía eléctrica, nada. Era difícil superar a la referencia híbrida, campeón único desde 2014, pero no imposible, y es que la principal diferencia entre su diseño y el de Mercedes reside en la arquitectura de las baterías: los italianos tienen un sistema de doble almacenamiento de energía, dos baterías, que puede estar detrás de esta caballos extra en los modos de máxima potencia y ha sido validado por la FIA, declarado legal. En la fábrica de Brixworth, donde se fabrican los motores de Mercedes, ni siquiera han estudiado la posibilidad de hacer unidades con este diseño, modificando lo que ya les ha funcionado.

¿Por qué? No lo necesitan. Su actual motor cumple con los más altos estándares de calidad, prestaciones y fiabilidad. Prácticamente no se rompe, al menos en manos del equipo oficial, cuando en la 'Scuderia' ya han perdido dos victorias, en Bahréin y Rusia, por averías mecánicas en el motor, ambas relacionadas con la energía eléctrica. Mercedes además se maneja en parámetros muy estrictos que garantizan la fiabilidad, muy conservadores, sin superar cifras o temperaturas de riesgo, y hay más dudas sobre el procedimiento de Ferrari en este apartado. Con la enorme ventaja en la clasificación, para comprobar el potencial real de Mercedes exprimiendo su motor habría que encontrarse a Hamilton y Bottas necesitados de puntos, perdiendo carreras y Mundiales. Y eso, en los últimos años, aún no se ha visto...