Porque los franceses afrontaban su cuarta temporada en el 'Gran Circo', tras adquirir Lotus por una libra esterlina, con el claro objetivo de reducir de manera significativa su desventaja con Mercedes, Ferrari y Red Bull y cimentar las bases de un monoplaza que les permitiese luchar por los podios en 2020.
Sin embargo, Renault no sólo está sufriendo para igualar el rendimiento de McLaren cuando sólo restan cuatro carreras para finalizar el año, sino que desde el pasado mes de septiembre conocen que los británicos dejarán de utilizar sus unidades de potencia en 2021.