"El Red Bull no me podía pasar, pero luego llegó la parada y..."
Otro abandono consecutivo para el piloto madrileño tras el de Spa cuando era sexto por un error en el cambio de neumáticos.
Otro abandono, como en Spa, el doblete de final de verano no ha podido saldarse con peores resultados para Carlos Sainz. Era sexto, mantenía la posición por delante del Red Bull de Albon tras una fiera lucha y también había recuperado la plaza con Vettel y Stroll, accidentados, pero en su parada en boxes el equipo no fijó bien el neumático delantero derecho y al salir del 'pit lane', Sainz tuvo que aparcar el McLaren. Fin de la carrera.
Mal balance, dos ceros seguidos después de dos quintos puestos consecutivos antes del parón, en Alemania y Hungría, que empobrecen el saldo de las carreras europeas. Además, ahora se sabe que la avería de Spa no fue culpa de Renault, sino de McLaren, porque el fallo estaba en el pedal del acelerador y no en el motor.
"Una pena, porque el sexto puesto parecía más o menos asegurado. Albon no me podía pasar, aunque tenía problemas después del toque con él que nos quitaba unas décimas por vuelta. Pero luego llegó el 'pit stop', ha sido un poco caótico con malentendido entre todos y no hemos podido salir de ahí. Es algo que ha salido muy bien durante toda esta temporada, hoy hemos perdido ocho puntos pero hemos ganado muchos más durante todo el año por lo mismo. Toca analizar, pero tampoco debemos estar demasiado tristes", dijo el madrileño.
"Se puso el semáforo verde, luego otra vez rojo, volvieron a tocar la rueda y me volvieron a bajar, en ese momento parecía que ya podíamos salir. Son cosas de las carreras, todos somos humanos y podemos cometer errores. Hay que analizar, aprender y mejorar", justificó el piloto, al menos satisfecho por contener a Albon: "El Red Bull era superior, pero no tanto como en otras carreras. Sabía que lo podía aguantar detrás y me da rabia porque a él le tenía controlado y Verstappen no llegaba. Hubiera sido un buen sexto".