Hamilton: el dominador absoluto de la era híbrida
Desde el fin de los motores V8 en 2013, el piloto británico, a bordo de su Mercedes, ha ganado más de la mitad de las carreras disputadas durante este periodo.
El giro de 180º que dio la Fórmula 1 en 2014, con la incorporación de los motores híbridos a los monoplazas, alzó a un piloto al que las polémicas y la decadencia de su equipo amenazaron con enterrar su talento: Lewis Hamilton. Contra todo pronóstico, un año antes del cambio reglamentario, el británico sorprendió a propios y extraños con una decisión atrevida a la par que acertada: su fichaje por Mercedes. Cinco años después, aquel movimiento ha convertido al expiloto de Mclaren en un cinco veces campeón del mundo.
Desde que se iniciase el cambio de era en la categoría reina, Hamilton ha sometido con puño de hierro al resto de rivales. Durante este periodo se han disputado 110 carreras, de las que el corredor de Mercedes ha ganado 56: es decir, ha salido victorioso en más de la mitad de los Grandes Premios. Tras él, se sitúa Rosberg con 20, siendo el único piloto en haberle arrebatado al británico un campeonato del mundo en los últimos cinco años. Le siguen Vettel con trece, Ricciardo con siete y Verstappen con seis.
En comparación con Schumacher, su gran rival por los récords, el británico queda aún por detrás. El Kaiser logró en sus cinco años como campeón del mundo 48 victorias en 85 carreras, lo que supone salir ganador en un 56,4% de las carreras disputadas, un 6% más que Hamilton. Sin embargo, el inglés ya ha batido la marca de poles del heptacampeón y se encuentra a 12 victorias de superar el registro histórico de 'Schumi'.
En esta temporada Mercedes ha logrado el mejor arranque de la historia de la Fórmula 1 con cuatro victorias y cuatro segundos puestos en las primeras cuatro carreras, superando el récord de Williams en 1992. Asimismo, se ha quedado a una sola victoria de superar las 11 consecutivas que logró Mclaren con Senna y Prost en 1988. Con estos datos, parece complicado pensar que Hamilton pueda ceder el bastión de mando en el campeonato en un futuro cercano.