Augusto Fernádez: "Moto2 era como una carrera de Moto3"
Lo que hizo el pupilo de Pons tras cruzar la meta: "He llorado, he gritado, me he parado y se me ha calado la moto…".
Augusto Fernández se ha doctorado en Assen, en la vieja catedral del motociclismo mundial. Lo ha hecho ganando la carrera de Moto2, en la que salía decimotercero, favorecido por la caída conjunta a dos vueltas del final de Baldassarri y Márquez, a los que iba pegado.
-Felicidades. Un día inolvidable.
-Aún no me lo creo. La verdad es que aún estoy asimilando todo. Cuando me acuerdo del momento de cruzar la meta me resulta increíble. Y por cómo ha sido la carrera, saliendo tan atrás. No es que haya salido súper bien, aunque sí que ha sido una muy buena primera vuelta, pasando a pilotos en casi cada curva, hasta que me he puesto en el grupo de delante. Y luego ha tocado gestionar un poco la carrera, porque ha sido loquísima, tipo Moto3, pegándonos por ahí atrás. Brad (Binder) marcaba el ritmo de la carrera, a veces parecía que se iba, pero he empezado a darme cuenta de que iba a ser una carrera de grupo. Márquez lo ha intentado también al final, pero ha tenido un susto. Estábamos en el límite todos, nadie tenía más. Y cuando han cometido el error, no sé si ha sido Balda o Márquez, porque no sé qué ha pasado ahí, he visto la oportunidad porque Brad estaba sufriendo un poquillo y he tirado a muerte. Me ha cogido un poco, pero bueno, le he visto y he tirado a muerte hasta conseguir la victoria.
-¿Qué es lo que ha pensado cuando iba tercero y los dos primeros se han ido al suelo a dos vueltas para el final?
-Me he cagado… Al principio me he cagado, me he puesto muy nervioso, pero después he pensado “es la mía”, porque Brad se iba quedando y he leído ‘+0.2’ en mi pizarra. Han pasado de ponerme ‘0.0’ a ‘0.2’ en una vuelta y sin que hubiese tirado demasiado, así que he pensado que él estaba sufriendo. Y he mantenido el ritmo en esas dos últimas vueltas, sin excederlo tampoco, para no cometer fallos, porque sabía que durante la carrera cuando alguien quería algo más se cometía un error. He sido consistente en las dos últimas vueltas y he podido conseguirlo.
-¿Qué ha hecho al cruzar la meta por primera vez como ganador?
-He llorado, he gritado, me he parado y se me ha calado la moto…(Risas). No sabía ni qué hacía, me daba igual. Luego he intentado arrancarla de nuevo y me he cansado más ahí que en toda la carrera. Ha sido increíble. Quiero agradecer al equipo por todo el trabajo que llevamos haciendo en este año que llevamos juntos, y también a mi familia y a mi padre sobre todo.
-Y está a 25 puntos del líder en la general…
-He visto los papeles y me he quedado un poco flipado. Es lo que tiene tantos ceros. Nosotros fallamos ya dos veces, en Argentina por mi fallo y en Austin por esa lesión, y es lo que tocaba. Por eso después de la pole de Montmeló tuve que conformarme con el cuarto, que no termina de saber igual de bien, Mugello quinto… Hemos ido sumando porque sabíamos que no podíamos hacer más ceros. Cuando llega la oportunidad hay que hacer estas cosas. Hoy se ha presentado y he ido a por ello. No tenemos que fallar más, porque queda mucho Mundial y todo se puede dar la vuelta.
-Ahora tenemos una carrera en una semana. ¿Habría sido mejor tener un parón o prefiere que vayan tan seguidas?
-Si son dos victorias, mejor dos victorias seguidas… No, al final está claro que irse de vacaciones con un buen resultado estaría muy bien, así que hay que ir a por ello.
-En los adelantamientos se le veía con mucha determinación. Alguno se ha acordado de usted…
-¿Sí?
-Vierge, por ejemplo.
-Hoy esto era Moto3, lo he dicho ya. Si veo un hueco meto la moto, y si no alguien me la mete a mí… Era así. Son las carreras.