Ferrari asusta a pesar del desastre de Albert Park
En Mercedes aún les señalan como favoritos a pesar de su doblete en Australia y el desastre de Maranello, donde esperan haber resuelto los errores de configuración.
El primer fracaso de 2019 se lo apuntó Ferrari, fuera del podio en Australia cuando habían ganado los dos años anteriores, y sin hacer funcionar correctamente al que parecía, y probablemente fue, el mejor monoplaza de la pretemporada. Pero el resultado de Albert Park pudo ser circunstancial, es un circuito semiurbano con poco agarre, algo bacheado y sin posibilidad de adelantamiento. La primera parrilla del año debería configurarse a partir de Bahréin, una referencia más convencional, y aquí se espera al SF90 al nivel de los mejores, no tan lejos de Mercedes. Quién sabe si delante.
Porque nadie se fía de Maranello, y menos en Brackley. "Bahréin es un terreno de juego completamente diferente, mucho calor, muy áspero. Creo que podemos ver variaciones en cuanto a las prestaciones de cada equipo", explicaba a As Toto Wolff, director de competición del equipo que arrasó en el primer gran premio de la temporada. En la fábrica, los italianos han podido corregir las pequeñas desviaciones en su puesta a punto que tuvieron efectos desastrosos, pero que no se debían a un problema fundamental del coche. En ningún momento encontraron el agarre óptimo, sufrieron con los neumáticos y eso salpicó al rendimiento total del coche de Vettel y Leclerc, cuyo potencial es muy superior, afirman desde Maranello.
"Allí vimos su potencial, así que esperamos que vuelvan fuertes a Bahréin con Red Bull también cerca, demostraron que tienen algo que decir en esta batalla", dice ahora el dirigente austriaco, que a pesar de sumar 44 puntos en una carrera quiere trasladar otro mensaje: "En Barcelona nos vimos como aspirantes y a pesar de lo que diga Melbourne, nuestro enfoque no ha cambiado. Una carrera no determina el orden de toda la temporada".
¿Y qué dicen en Italia? Mattia Binotto: "Sakhir es muy diferente de Albert Park, con la tracción y la frenada como elementos muy importantes. Creo que como equipo debemos confirmar en Bahréin que hemos entendido nuestras áreas de debilidad en Australia, por factores diversos, que no nos han permitido mostrar todo el potencial del coche. Esperamos ver el efecto de las correlaciones que hemos hecho. Somos conscientes de que nuestros rivales serán fuertes, pero esperamos enfrentarnos a ellos". El circuito del desierto espera con unas jornadas algo ventosas, que llenarán de arena la pista antes de que lleguen los monoplazas. Mientras tanto, los efectos de la impresionante pretemporada de la Scuderia siguen latentes: Mercedes aún teme que tengan un coche dominante, Ferrari aún piensa que puede tenerlo.