Ferrari se oculta, Mercedes va en serio y McLaren empieza lejos
Mejor tiempo para Hamilton en la primera jornada de libres seguido de Bottas, con Vettel y Leclerc escondidos. Bien Red Bull y Renault. Sainz, 14º.
Ferrari y Mercedes se halagan mutuamente y procuran no coincidir demasiado en la pista, no vaya a ser que algo deje entrever quién está por delante de quien. Porque la lectura de los primeros entrenamientos libres de 2019 es que Hamilton ha aplicado un correctivo a quienes pensaban que no eran la referencia, pero la realidad dice otra cosa: Vettel no forzó la maquinaria y Leclerc ni siquiera marcó su tiempo con el neumático más blando, fue mejor el de los Libres 1 (23.6). El monegasco, por cierto, acabó su jornada con un violento trompo.
Quizás olvidaron desempaquetar los lastres después de los test y buscan una entrada triunfal en la clasificación de este sábado. En cualquier caso, Mercedes empieza al frente con ocho décimas sobre el resto de los mortales. El crono de Lewis fue dos décimas mejor que el que hizo en la Q1 de Australia 2018, así que parece una buena referencia. El de Vettel, una décima más lento. Ferrari no está donde dice que está. ¿Y el de Red Bull? Idéntico, un 23.4 calcado al del año pasado habiendo cambiado de motor, por tanto Honda sí ha sido capaz de entregar un propulsor con al menos tanta potencia y prestaciones a una vuelta como las que ya ofrecía Renault. Otra cosa es la fiabilidad, pero eso sólo podrá medirse a largo plazo.
Más peleado está el galardón por ser el cuarto coche de la parrilla con fogonazos de Kimi Raikkonen (Alfa Romeo), que parece que sigue en Ferrari, y un apretón final de Renault con gomas blandas para mejorar las malas sensaciones de la mañana. Estarían a una décima de Red Bull en clasificación de mantenerse estas diferencias, lo cual sería una sorpresa grande. Haas brilló, y mucho, con el neumático medio aunque luego se perdieron entre la masa, pero deberían dar un paso adelante en carrera porque su margen parecía importante.
¿McLaren? No hay que engañarse, la base parece ciertamente mejorable. El punto positivo es una digna vuelta de Sainz con compuesto ‘rojo’ en la que aventajó con 0.6 segundos a su compañero de equipo, Norris, que acabó antepenúltimo, sólo por delante del furgón de cola, los Williams. Si el potencial de un coche se mide por el de su segundo piloto, el de Woking es preocupante. Pero Carlos consiguió ser más rápido que un Sauber (Giovinazzi), dos Racing Point (Pérez y Stroll) y un Toro Rosso (Albon) para ser 14º. No es el mejor punto de partida, sobre todo porque con gomas medias el panorama no se esclarece. El primer baremo real estará en clasificación, donde el objetivo del madrileño puede ser pasar el corte de la Q1 sin sufrir demasiado, y luego esperar. Porque de Kimi a Pérez, del 5º al 16º, hay un segundo de diferencia: la parrilla se ha apretado. Eso sí es incuestionable.