Ogier: "No me considero mejor que Sainz o Kankkunen"
El hexacampeón del mundo insiste en su retirada: "Estos dos años con Citroën serán mi último contrato. Me quedan muchas cosas por hacer en la vida y empiezo a estar cansado".
Imbatido desde hace seis temporadas, la de 2019 será una campaña especial para Sebastien Ogier. El hexacampeón del mundo, de 35 años, regresa a su primer equipo, Citroën, y además se volverá a ver las caras con su eterno rival, el otro Sebastien, Loeb, que correrá seis pruebas. Primer asalto en su tierra, en Gap, en los Alpes, donde el jueves arranca el Rally de Montecarlo.
—¿Cómo ha sido su regreso a Citroën?
—He percibido que todo el mundo estaba contento por mi regreso, y les veo muy motivados. Mis primeras impresiones con el coche son buenas. Por supuesto, hay que trabajar, pero tiene mucho potencial. Espero que mi experiencia ayude, y también la aportación de Lappi, que aunque es joven también ayuda.
—¿Ha cambiado mucho Citroën desde que se fue?
—Ha pasado mucho tiempo, ocho años, y es muy difícil comparar. Todos, empezando por mí, hemos cambiado mucho. Ahora tengo mucha más experiencia, y un estatus diferente al de entonces. Hay gente que no ha cambiado, pero la jefatura es totalmente diferente. Están muy motivados y ese ha sido uno de los motivos para volver. En la parte técnica sigue habiendo gente de entonces que se han mostrado muy contentos de que volvamos a trabajar juntos.
—¿A quién ve como favorito esta temporada?
—Yo espero estar en la pelea, y sería un gran problema si no lo estamos. A principio de temporada siempre considero a todos los rivales. Pero si hay que vigilar a alguien más de cerca es a los mismos rivales de los últimos años.
—¿Cómo asimila el regreso de Loeb?
—Me gustaría que hiciera un programa completo por muchas razones, pero es bonito volver a tenerle aquí. Es bueno para el show. Tuvimos grandes batallas entre nosotros y siempre hemos luchado, por lo que es muy excitante que regrese, aunque ahora creo que será una lucha más abierta, con más pilotos peleando. Pero el planteamiento es diferente, porque él hará unas pocas carreras y nosotros el campeonato completo.
—¿Cuánto tiempo seguirá en los rallys?
—Ya he dicho que estos dos años con Citroën serán mi último contrato en rallys. Nunca puedes decir nunca jamás al cien por cien, pero ese es mi plan al noventa y nueve por ciento. Me quedan muchas cosas por hacer en la vida. He sido un afortunado con una vida de ensueño durante muchos años, pero comienzo a estar cansado. Quiero ser un buen padre, estar más en casa y llevar a mi hijo al colegio. Pero voy a dar el máximo estos dos años.
—Y si termina estos dos años con dos títulos más en su palmarés, ¿no intentará batir los récords de Loeb?
—Yo creo que no cambiaría nada si tengo ocho o nueve títulos. Por el momento tengo seis. Es algo que no es muy importante para mí. Tengo seis títulos, y no me considero mejor que Carlos Sainz o Juha Kankkunen porque tenga más títulos. Los tiempos cambian y las circunstancias también. No es algo que me motive.
—Tenemos 14 rallys este año. ¿Cree que puede incrementarse el calendario?
—No se puede aumentar mucho el número de rallys, sobre todo porque incrementaría mucho los costes para los equipos. Quizás se podrían compactar más las pruebas, no acortarlas. Pero sí hacer los mismos kilómetros en dos días. Quizás así se podría añadir un rally más al calendario, pero nunca quitando los rallys más carismáticos.
—¿Cuál es el rally que más le gusta?
—Difícil de decir... Quizás lo sean en los que el coche ofrece más prestaciones, pero al final estamos en un campeonato y todos son importantes. Por supuesto Montecarlo es un rally especial para mí porque corro en casa. Ojalá podamos seguir nuestros éxitos allí este año, pero será difícil con coche y equipo nuevo. También me gustan Suecia con la nieve, Finlandia que es una locura con estos coches tan rápidos o Gran Bretaña que siempre se nos da bien.