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Roser Alentà: "Nunca pense que Marc ganaría siete mundiales"

La madre de Marc Márquez ha reconocido que, "nunca te puedes imaginar como será la carrera deportiva de un hijo tuyo ni que de que pudiera llegar hasta donde él ha llegado".

Roser Alentà, madre de Marc Márquez, feliz por el séptimo título mundial de su hijo mayor.

La madre de Marc Márquez, Roser Alentà, no oculta su satisfacción por el séptimo titulo mundial de su hijo mayor porque, "nunca te puedes imaginar la carrera deportiva de un hijo tuyo ni que de que pudiera llegar donde él ha llegado. Este año no pensé que sería ya campeón en Japón porque había que cuadrar muchos factores".

 "En ese momento me dije: "bueno ya está, nos hemos quitado un peso de encima y ahora, lo que queda, Australia, Malasia y Valencia ya los veremos con más tranquilidad", añade Roser.

El padre de Marc, Julià, viaja con él y con su hermano menor Álex, campeón del mundo de Moto3 en 2014, a las carreras, pero Roser se queda en casa y comenta que, "las carreras las miro sola en casa, no quiero a nadie a mi lado, me pongo nerviosa pero no digo nada. Bueno, a veces hablo sola, pero me digo paciencia porque no puedo hace nada"

A sus 25 años, Marc Márquez está batiendo todos los récords y para muchos puede llegar a alcanzar los quince títulos mundiales de Giacomo Agostini, pero Roser es muy sincera, "que Marc pueda llegar a los títulos de Agostini no lo piensas en ningún momento, como tampoco pensaba que pudiera llegar a tener siete, ni cinco ni cuatro; ni el primero cuando quedo campeón en 2010 porque ya fue una sorpresa y pensar ahora que llegue a quince no nos lo podemos imaginar. Lo vives en el momento y solo deseas que tenga suerte".

También está orgullosa de su otro hijo, Álex, de 22 años y piloto de Moto2, sobre quien opina,"me parece bien que Alex quiera seguir los pasos de Marc. El tiene una idea clara del porque quiere ir en moto, pero también se lo ha de ganar. Pero si quiere seguir adelante y la suerte le acompaña para nosotros es perfecto y, llegue donde llegue, le apoyaremos en todo."

"No te das cuenta de la evolución de los dos porque has ido viendo carreras, viviendo muchos momentos hasta llegar aquí. La verdad es que yo como madre preferiría que no corriesen", reconoce.

Su verdadero momento de tranquilidad es, "cuando los tengo en casa y cuando acaba el mundial, en diciembre enero, febrero también, pero cuando llega febrero me digo, "bueno ya está esto vuelve a estar aquí, a sufrir otra vez".