Pablo Nieto: "Mi parte del título se la dedico a mi padre"

El de Francesco Bagnaia supuso otro título para la saga Nieto, el segundo que consigue Pablo en calidad de team manager. Ganó en 2013 el de Moto3 al lado de Maverick Viñales en el equipo LaGlisse y ahora llega este de Moto2 con el Sky VR46, con Rossi de jefe, para el que trabaja desde 2015. Resultó muy emotivo entrevistarle porque su dedicatoria llega al corazón de miles de moteros de nuestro país…

-Otro título para la saga Nieto y el segundo suyo como team manager. Ya es bicampeón del mundo.

-Suena muy bien. Es espectacular. La verdad es que ha sido un año muy tenso y muy bonito. Me emociono todavía al pensarlo.

-¿Cambia mucho la película a pelear desde el box que como piloto?

-Sí, claramente.

-¿Cambiaría estos dos títulos que tiene como team manager por uno solo como piloto?

-(Sonríe). Creo que sí que lo cambiaría. Como piloto es mucho más especial, sobre todo cuanto te lo curras tanto y haces un temporadón como el que ha hecho este año Bagnaia.

-¿Dónde ha estado la clave? A mí Pecco me parece un pilotazo.

-Sí que lo es. La clave es un pilotazo y un equipazo. Hemos trabajado muy, muy bien. Ha venido todo perfecto, porque Luca (Marini) también ha ganado una carrera ya y eso es algo que no estaba en las quinielas.

-Sólo le ha faltado al Sky VR46 que el jefe no se hubiera caído cuando lideraba en MotoGP?

-Su victoria hubiera sido espectacular. Creo que no se merecía esa caída. Tiene 39 años y en esta carrera seguro que habrá aprendido mucho todavía.

-¿Qué se han dicho cuando se han visto?

-Me ha felicitado a mí y a todos. El equipo es suyo. Ha sido un carrerón increíble en el que su hermano ha ganado su primera carrera. Ha sido todo perfecto en Moto2. La lástima ha sido su caída.

-Me ha encantado verle en el podio al lado de sus pilotos. ¿Quién decide el que sube?

-Yo. No subo nunca, pero en una gran ocasión como la de hoy quería subir.

-Imagino que tendrá muy clara su dedicatoria, ¿no?

-Sí. Mi parte del título se la dedico a mi padre, que estará encantado. (Las lágrimas afloran en sus ojos).

-¿Qué le diría ahora el Maestro en un momento así?

-(Las lágrimas caen ya por su mejilla). No lo sé, estaría conmigo aquí, disfrutando. (Y rompe a llorar, y nos abrazamos pensando en el eterno Ángel Nieto).

-Estará muy orgulloso de usted y de verle trabajar tanto como lo ha hecho. ¿Quién le iba a decir a usted que al final sería un currante?

-Hago lo que me gusta y eso es lo más bonito de todo. Lo que te emociona.