Bagnaia logra el título el día de la primera victoria de Marini
Alegría total para el Sky VR46 propiedad de Rossi, con triunfo de su hermano y victoria de su pupilo, que pasará a ser rival suyo el año próximo en MotoGP con una Ducati satélite.
Carrera perfecta la de Moto2 en Sepang para el Sky VR46, con el primer triunfo mundialista de Luca Marini y, lo más importante, un tercer puesto de Francesco Bagnaia que le da el título mundialista. De todo ello ha sido testigo de excepción Valentino Rossi, que antes de ir a prepararse para su carrera de MotoGP ha saltado a pie de pista para felicitar a su hermano por su importante victoria y a su pupilo por su grandísimo título.
Marini ya había demostrado esta temporada que era mucho más que el hermano del campeonísimo, con cuatro podios en su haber, y tres de ellos de manera consecutiva, y ahora se ha descolgado con una victoria inapelable, dominando desde la primera vuelta y controlando el empuje final de Oliveira, que ha acabado a 1.1 del italiano. Hacía ya varias carreras que el portugués tenía crudo ganar el título y aquí dependía para retrasarlo de meterle once puntos a Bagnaia. El nuevo campeón, por su parte, tenía claro que con acabar en el podio le bastaba, y no ha entrado en peleas para entrar tercero en solitario.
La anécdota ha sido que el equipo se ha trabado la celebración para la vuelta de honor, preparándole una moto con el 1 y muchos motivos en el clásico dorado de campeón. Sin embargo, la Kalex de Pecco no ha querido arrancar y se ha tenido que volver en scooter al parque cerrado, donde ha seguido la fiesta de un equipo en el que tiene un papel fundamental como team manager Pablo Nieto, que ha subido al podio junto a sus pilotos.
El mejor de los nuestros ha sido Álex Márquez, séptimo, superado también pese a salir desde la pole por Pasini, Quaratararo y Baldasarri. Más atrás, Mir 10º, Vierge 11º, Navarro 13º y con una caída, Edgar Pons 20º e Isaac Viñales 24º. No han acabado la carrera Fernández y Lecuona. Mal día para los españoles, todo lo contrario que para los italianos, que presumen de otro título y nuevo ganador de GP.