Vettel ante la presión de ganar en el mejor coche de la parrilla

Ganar no es nunca fácil, tampoco en la Fórmula 1, ni aunque tengas el mejor coche. Esta temporada Sebastian Vettel debería ser líder destacado del Mundial y sin embargo está segundo a 17 puntos de Lewis Hamilton a pesar de su última victoria en Spa Francorchamps. El alemán llega a Monza como claro favorito, y con su Ferrari como el mejor coche en esta pista, y también en el resto del campeonato. Vettel está ahora ante la presión de ganar con el mejor monoplaza, pero en una escudería con la importancia histórica de Ferrari donde la tensión es tremenda.

El alemán ya ganó dos títulos teniendo que remontar y teniendo el mejor monoplaza cuando estaba en Red Bull. En 2010 salió de Monza a 24 puntos de su compañero Mark Webber y a tres de Alonso que llegó líder a la última carrera, pero terminó ganando tres carreras, en otra fue segundo y tuvo un abandono. En ese momento, igual que ahora, existía esa certeza, si no tiene algún percance o avería ganaría el campeonato. Más aún en 2012. Tras Italia era cuarto a 39 puntos de Fernando, pero ganó las cuatro carreras siguientes de manera consecutiva con un Red Bull que se pegaba al asfalto en las curvas. Y acabó ganando el Mundial en Brasil.

Ahora debe hacerlo con Ferrari y con un rival como Hamilton en un coche peor, pero similar, no hay tanta diferencia entre el monoplaza rojo y el Mercedes como hubo entre aquellos Red Bull y el Ferrari de entonces.