La F1 adelanta el arranque de la próxima temporada
La fecha para el GP de Australia es del 14-17 de marzo y, de ser aprobada por la FIA, Alonso tendría un problema ya que coincide con la cita de Sebring del WEC.
El pasado mes de junio la compañía propietaria de los derechos de la F1, Liberty Media, empezaba a diseñar el calendario de la próxima temporada. A priori, se presentaban algunas novedades curiosas. Por ejemplo, se especulaba con la posibilidad de que la temporada fuera más larga, concretamente dos semanas más de lo habitual, por lo que el telón podría bajarse en el mes de diciembre y no en noviembre. Ahora, sin embargo, hemos podido saber que el inicio de la temporada será antes de lo esperado.
Así lo anunciaban los organizadores del GP de Australia al confirmar que el arranque de su gran premio, y de la temporada, tendrá lugar el fin de semana del 14-17 de marzo. El motivo no es otro que el apretado espacio en la agenda australiana. El Festival Moomba, la semana anterior a la carrera, y el inicio de la temporada de la Liga de fútbol australiana, la posterior, dejan inhabilitadas ambas fechas, por lo que el cambio se presenta como una dosis extra de oxígeno para los dirigentes. "Anunciar la fecha del Gran Premio de Australia de Fórmula 1 2019 más de ocho meses antes el evento es una noticia fantástica. Esperamos que eso estimule a los visitantes extranjeros y a los del resto del país a planificar una larga visita a Melbourne y Victoria", señalaba Andrew Westacott, director ejecutivo del GP de Australia. Sin duda, la estrategia les funciona. Hasta 295.000 espectadores acudieron al GP de Australia en los últimos años según la dirección del GP. "El comienzo de una temporada de F1, nuestra superestrella australiana Daniel Ricciardo, una ronda del campeonato de Supercars y mucha acción fuera de pista: es un evento obligatorio en 2019", afirmaba Westacott.
El problema podría surgir para Fernando Alonso que, de seguir en la F1, le coincidiría con la ronda del WEC en Sebring. Aun así, la decisión final está pendiente de la aprobación de Consejo Mundial de la FIA, aunque en Australia ya lo han dado por hecho.