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F1 I GP DE EEUU

La Fórmula 1 pone a prueba en Austin los guantes biométricos

La Federación Mundial del Automóvil está utilizando la primera jornada de entrenamientos para analizar como funciona esta nueva tecnología.

AUSTIN, TX - OCTOBER 20: Daniel Ricciardo of Australia and Red Bull Racing prepares to drive in the garage during practice for the United States Formula One Grand Prix at Circuit of The Americas on October 20, 2017 in Austin, Texas.   Mark Thompson/Getty Images/AFP
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Mark ThompsonAFP

La decimoséptima prueba del Mundial de Fórmula 1 2017 no está siendo una carrera más. Más allá de la posibilidad matemática de Lewis Hamilton de proclamarse tetracampeón del mundo, la Federación Internacional del Automovilismo está utilizando la carrera americana para seguir mejorando la seguridad de la competición.

Una de las principales novedades son unos guantes biométricos que solamente los pilotos de Force India, Red Bull y Haas están experimentando en el circuito de las Américas. El proyecto, desarrollado por Van der Merwe en colaboración con el médico de carreras de la Fórmula 1, Ian Roberts, mide el pulso y el contenido de oxígeno en la sangre en el área de la mano del piloto.

Unos barómetros que en el caso de un accidente, podrían servir de gran ayuda para evaluar mejor y más rápidamente si el piloto puede haber resultado lesionado en el incidente. "Si hay un gran accidente y el piloto no sale del automóvil, ¿qué pasa con él? No lo sabemos hasta que estamos en el accidente. Toda la tecnología que tenemos para controlar a los pilotos solo está disponible en un hospital, y solo funciona cuando los pacientes están tranquilos y la habitación está seca, cálida y bien iluminada. Hasta ahora, no había nada que pudiéramos utilizar para evaluar la situación en un coche de carreras".

Un sensor ultraligero, que funciona con una pequeña batería, enviaría sus datos por señal de radio al coche médico 500 metros antes de llegar al lugar del percance, proporcionando a los médicos tiempo suficiente para adaptarse a cualquier situación. "Si logramos que la tecnología funcione en el entorno tan difícil como un automóvil de Fórmula 1, funcionaría también en otras situaciones, dándonos nuevas posibilidades", reconoce Roberts a 'Motorsportotal'.