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FÓRMULA 1

Wolff no olvida "las cicatrices" que dejó Alonso en Mercedes

Recurre a la tensión que vivió Fernando en McLaren junto a Hamilton en 2007 para explicar la elección de Bottas como sustituto de Rosberg
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Fernando Alonso y Lewis Hamilton durante el año que compartieron equipo en McLaren en 2007.
BRUNO DOMINGOSREUTERS

2007 es el año al que recurría constantemente el jefe de Mercedes cada vez que retumbaba en Brackley el nombre de Alonso para ocupar el asiento de Rosberg. Ellos, como suministrador de motores, sufrieron en primer plano el ambiente irrespirable que creó McLaren con la absurda guerra interna entre el asturiano y Hamilton. Eso, además del asunto del espionaje a Ferrari que acabó ensuciando todo aún más, es lo que echó para atrás a los alemanes en su intento de ir a por Fernando y lo que terminó sentando a Bottas en el W08.

El propio Toto Wolff se ha encargado de recordarlo otra vez. "Hay un nombre en la historia con el que hubo una verdadera explosión entre dos pilotos: nuestro amigo español (Alonso) nos dejó estas cicatrices", recuerda el austriaco en una entrevista al 'Stuttgarter Zeitung' para explicar por qué tampoco apostaron por Wehrlein: "Puede conducir muy bien, pero también es un personaje explosivo, como Hamilton. En el coche es bastante positivo, pero en combinación con Lewis necesitábamos tener en cuenta esa explosividad".

Por eso, huyendo de ese posible peligro para su estabilidad, apostaron por la calma finlandesa que caracteriza a Bottas: "Espero momentos más tranquilos, aunque si Valtteri es realmente bueno y los dos están cerca, puede ser igual de difícil. Pero incluso Bottas sabe que tiene poco tiempo para probarse a sí mismo. No podemos permitirnos poner a alguien en el coche que no sea lo suficientemente rápido y no empuje a Lewis, pero su personalidad jugó un papel: Valtteri es extremadamente tranquilo y no manipulador".

Ha dejado patente su carácter, y ahora a Bottas le falta demostrar que tiene la velocidad. Solo con evitar conflictos no les vale, aunque les dará un respiro tras lo vivido con Rosberg en el box. "Nico fue un piloto top que se empujó a sí mismo y a su compañero, pero por la rivalidad entre ambos se había vuelto tan intensa que era negativa. Siempre teníamos que lidiar con esas animosidades en lugar de ocuparnos de los problemas de rendimiento". Alonso le recuerda a lo mismo, por eso le cierra la puerta… mientras esté Hamilton.

Sigue la narración del GP de Australia: Clasificación del Circuito de Albert Park