Las 300 de Button: de Williams a McLaren siendo el rey en 2009
El británico cumplió esa cifra redonda en Malasia, sólo tiene por delante a Barrichello y Schumacher, y repasamos su trayectoria.
17 años y 300 carreras dan para tener un repertorio inacabable de anécdotas con las que amenizar las tardes con tus nietos. Un número mágico del que sólo pueden presumir tres pilotos a lo largo de la historia y Jenson Button, una vez acabada la carrera de Malasia, es uno de ellos. A excepción de Barrichelo (323) y Schumacher (307), nadie ha corrido tanto en la Fórmula 1 como él. Los libros del deporte le dedicarán un buen número de sus páginas. El gentleman inglés está de enhorabuena y celebramos su hito con él.
Todo empezó en Williams
Una juventud de éxitos en el karting le llevó a subirse a los monoplazas a los 18 años, donde logró una prueba con un McLaren de F1 en 1999 tras ganar un premio al mejor piloto joven. Pero fue BMW Williams el equipo que le dio la posibilidad de debutar en el Mundial en 2000 tras despuntar en la Fórmula 3. En su debut consiguió 12 puntos, la mitad que su compañero Ralf Schumacher.
Maestro de Alonso en Renault
El año siguiente cambiaría Grove por Enstone al firmar por Benetton para formar equipo con Giancarlo Fisichella bajo las órdenes de Briatore. Una temporada difícil por sus muchos abandonos (hasta siete) y las deficiencias de su coche (séptimo mejor equipo). En 2002, cuando la formación pasó a llamarse Renault, trabajaría junto a Alonso, que era el probador. Mejoraron los resultados de 2001 y venció a su compañero Jarno Trulli.
Honda le dio sus primeros podios y su primer triunfo
En 2003 dejó la marca del rombo y fichó por Bar Honda. En sus seis años al volante del coche con motor japonés conseguiría los primeros éxitos de su carrera. La de 2004 fue su mejor campaña con ellos: acabó tercero en el Mundial por detrás de los Ferrari y subió al podio 10 veces, pero ninguna como vencedor. Para eso tuvo que esperar a su carrera 113, Hungría 2006, donde ganó saliendo 14º. Fue su único triunfo con ellos.
Campeón en 2009 con la revelación de Brawn GP
De las cenizas de Honda surgió un equipo dirigido por Ross Brawn y motorizado por Mercedes que dio con la tecla que nadie vio, el doble difusor, y que le permitió ser el rey de la F1 por primera vez en su vida. Arrasó en un inicio demoledor con seis triunfos en las siete primeras carreras y aguantó el empuje de Red Bull y Vettel para levantar el título por 11 puntos. Alcanzó una gloria a la que nunca más ha tenido acceso.
Fiel a McLaren hasta el final
Siete años lleva en Woking, desde 2010, cuando llegó con la esperanza de poder repetir éxitos con un equipo de categoría, pero se encontró con el impenetrable dominio de Red Bull y de Mercedes y lo máximo que ha logrado fue ser segundo en 2011. 8 victorias y 18 podios más son sus cifras con McLaren hasta el momento. Al acabar el año se irá, pero dejará la puerta medio abierta. Quién sabe si volverá para pasar a Rubinho y Schumi…