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FÓRMULA 1

Caso Mercedes: insostenible para Horner, sin fin para Massa

El jefe de Red Bull ve difícil manejar la situación, aunque no quiere ver órdenes de equipo, y el brasileño piensa que durará hasta el final del año.

Rosberg y Hamilton chocando en Silverstone.
CAPTURA DE TELEVISIONDIARIO AS

Es una discordia que acapara la actualidad de la Fórmula 1, una lucha que está en boca de todos. La guerra de Mercedes ha comenzando una nueva batalla y no faltan cronistas para contarlo ni observadores para opinar. Lo hacen desde fuera del paddock, desde dentro, desde las gradas, desde las redes sociales… y todos coinciden en una cosa, lo difícil que es gestionarlo y lo bien que se lo pasan con ella. Los últimos en hablar, uno que manda, Christian Horner, y otro que pilota, Felipe Massa.

En ellos tenemos versiones de las dos partes importantes de una escudería y el jefe de Red Bull tiene clara una cosa, no quiere órdenes de equipo. "Tienen un margen suficiente sobre el resto, ¿por qué considerar eso? Crea interés, es bueno para la F1 tener dos pilotos que no son los mejores compañeros. Pero es difícil, son jugadores de equipo y Mercedes irá a por el premio grande. Inevitablemente, van a hacer lo que es correcto para ellos", opina en declaraciones recogidas por ‘Motorsport’.

El británico, que conoce bien las órdenes de equipo (¿recuerdan el Multi-21?), cree que la disputa entre Hamilton y Rosberg no ha hecho más que empezar: "¿Cómo de sostenible es para esa pareja continuar como un equipo? Mientras estén en esta situación, con la competitividad que tienen y la cercanía de rendimiento, estos problemas no van a ser cosa de una sola carrera. Pero es un elemento atractivo. Cuando tienes un coche dominante, es genial ver a los chicos luchar cara a cara".

Muy parecido piensa Massa, que además de culpar a Rosberg coincide con Horner, no ve su fin: "La mayor parte de la responsabilidad corresponde a Nico. No es fácil manejar estas situaciones. Tal vez en las próximas carreras habrá órdenes, pero ¿las obedecerán? Además, esto crea interés y da mucho que hablar. Es posible que esta confrontación continúe hasta la última carrera. Es genial para los aficionados, pero yo no querría estar en la piel de los que tienen que manejar el equipo...".